Hunter | JJK [+18] ©

Capitulo 27.

—¿Señor Jeon?— oí del otro lado de la puerta junto a unos toques —. Permiso...

—Dígame señorita Haneul, ¿Necesita algo?

—Quería preguntarle si tenía algo por hacer ahora...

—La verdad no, pero... ¿Por qué pregunta?— le pregunté confundido.

—Pues... pensé que tal vez podríamos ir a almorzar los dos ya que ninguno de los dos tiene algo importante que hacer ahora— dijo uniendo sus manos frente ella y bajando un poco su cabeza.

—¿Me está invitando a almorzar señorita Haneul?— pregunté nuevamente ésta vez incrédulo.

—Si— afirmó mirándome de reojo, sin embargo me percaté de sus mejillas levemente sonrojadas —. Se me ocurrió como una muestra de agradecimiento por aceptarme aquí y por escucharme ayer mientras me traía.

—No tiene que agradecerme nada— dije poniéndome de pie mientras me colocaba mi saco nuevamente —, pero igual acepto el almuerzo. La verdad es que me ando hambriento.

Sonríe sinceramente contagiándola y dándole paso a que saliera primero de la oficina mientras yo la seguía y cerraba la puerta a mi espaldas, avisé a una de mis secretarias que iría a comer y que si pasaba algo urgente que no lo pensara dos veces y me llamara.

—¿Sushi o pollo?

—El sushi estaría bien pero el pollo es mi favorito— hablé con una sonrisa.

—Pollo será.

Ambos salimos de la empresa mientras comenzábamos a hablar nuevamente de cosas al azar, cada vez que teníamos la oportunidad de hablar me daba cuenta que seguían apareciendo cosas en las cuales pensábamos igual, teníamos muchas cosas en común y cada vez me sorprendía más. No hizo falta ir en auto ya que uno de los mejores restaurantes de pollo (según ella) se encontraba cerca de aquí así que planteó la idea de ir caminando y la verdad, no me pareció tan mala.

Pedí que nos dieran una mesa alejada de las personas, tal vez en la segunda planta para tener más privacidad y evitar malos entendidos, pensé que me dirían que no era posible porque por lo que veía el restaurante estaba repleto, sin embargo si había un lugar disponible por suerte. Agradecimos a la chica que nos acompañó hasta nuestra mesa y comenzamos a ver el menú, literalmente el pollo podía ser frito, asado, medio crudo, un poco pasado, habían varios tipos... ¿Cómo no había venido antes aquí?

—¿Prefieres vino o algo más ligero?— le pregunté.

—¿Tengo que recordarle que soy yo quién le estoy invitando?

—Cambio de planes— dije sonriendo —, me gusta ser quién invita.

—Pero...

—No se preocupe por agradecerme, está bien.

—Es que yo quería hacerlo.

—¿Quiere agradecerme?— pregunté recibiendo un asentamiento de su parte —, bien. Entonces demuéstramelo con acciones en la empresa, no dudo que no lo vayas a hacer pero igual pienso que sería mejor así, ¿Trato?

—Trato— respondí extendiendo su mano para que la estrechara, cosa que hice con mucho gusto —. Le prometo ser la mejor.

—Y no lo pondré en duda, confío en éso— le dije sonriendo.

—Vino está bien.

-¿Mmh?

—Vino— me habló señalandolo en mi menú —, vino señor Jeon.

—Oh si, claro claro— reí —, entonces vino.

Una vez nos trajeron la comida, Haneul ofreció que la probara primero ya que ella claramente ya había venido antes, en cambio yo no, así que así lo hice. Me sorprendí cuando probé el pollo porque en verdad estaba realmente bueno, la salsa agridulce que lo acompañaba le daba un toque espectacular.