Psycho || WinRina G!P

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|Actualidad|

—¿Winter...?

Karina se levantó de golpe de su cama, sintió su cara roja. Acababa de tener un sueño con Minjeong. Con la Minjeong de 16 años, para ser exactos cuando tuvieron sus primeros besos.

Se sintió realmente avergonzada por el simple recuerdo.

Miró el reloj de su habitación. Era de madrugada, demasiado temprano para que Winter regresara, o tal vez no lo haría, lo que sería un alivio.

Cerró sus ojos y escuchó dos golpes en su ventana. Los abrió y no vio nada, cuando trató de dormir esos golpes volvieron.

No abrió sus ojos y se cubrió de pies a cabeza con su manta. Su instinto de madre la hizo despertar de golpe a los pocos segundos, se levantó y encendió la luz de su habitación.

Cuando vio el motivo del ruido exclamó. —¡Hija de puta!

Winter tenía una expresión cansada del otro lado de la ventana.
Karina sostuvo su mano contra el pecho y comenzó a respirar lentamente para calmar sus latidos.
No esperaba despertar y ver a Winter como una acosadora en la ventana de su habitación.

Es probable que así haya entrado la primera vez, algo que no pudo repetir porque Karina aseguró esa ventana.

Sintió su sangre regresar a su cuerpo y caminó hacia la ventana, cuando la abrió Winter habló con pesadez. —Tardaste. —Sus ojos apenas podían estar abiertos, algo que la pequeña observación de Karina logró ver.

Jimin ladeó su cabeza dejando caer su cabello hacia ese lado. —¿No regresabas en la noche?— Cuestionó sin dejar de mirarla a los ojos.

—Dije que era posible, sin embargo, vine en cuanto pude. Quiero estar junto a ti cada día.— Jimin frunció el ceño.— Y con Haewon.

Karina abrió sus ojos sorprendida cambiando su ceño. Minjeong había dicho el nombre de su hija de forma normal, sin sonar despectiva. ¿Era buen camino? ¿No?
Karina se alejó de la ventana y esperó que Winter pasara por allí, cosa que sí hizo.

Tiró una mochila junto a su gran abrigo y guantes.

—Estoy cansada y serás mi almohada esta noche.— No era ya de noche, pero Jimin no tuvo el tiempo suficiente de mencionarlo.

Minjeong la tomó de la muñeca luego de cerrar la ventana a su paso. Tiró a Jimin hacia la cama y luego se tiró ella también.

Karina quiso quejarse, pero sintió el peso de Winter sobre ella y se calló sin saber qué hacer o decir. No esperaba eso.

Podría golpearla, ni siquiera le pidió su opinión, pero hacerle caso por ese momento podría ayudarla en descubrir la verdad detrás de su llegada repentina luego de 4 años, no creía que fuera el poder de la maternidad.
Quizá antes pensó en eso, pero ahora era extraño.

Imaginando un poco y en el mejor escenario; Winter estaba siendo honesta con su cambio hacia Haewon, ella podría estar aceptandolo. Jimin no estaba segura de si era porque seguía media dormida o solo era ilusa, pero pensar en ese escenario la hizo sentir paz momentánea hasta que sintió a Winter relajada sobre ella y se heló.

¿De verdad confío en ella en ese momento? ¿Winter no pensó que la dejaría ahí botada? ¿Que la golpearía?

No. Solo se durmió sobre ella con tanta paz que Karina no pudo comprender en absoluto.

—¿Bromeas? — Susurró.— No puedes...

Minjeong gruñó y alzó su mano hacía la boca de Karina.