Psycho || WinRina G!P

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Cada día para Jimin era lo mismo, los mismos pensamiento y las mismas cien preguntas. Y ahora, su cerebro decidió que era buen momento para recordar toda su relación a través de sus sueños. Soñaba con MinJeong, con la MinJeong de preparatoria, aquella de la que se enamoró perdidamente y quien es ahora su mayor arrepentimiento; no por haberla amado, si no por no haber podido detenerla.

Se quedó sentada en su cama viendo la puerta de su baño cerrada, Min estaba duchándose, la tuvo que obligar, Jimin estaba segura de que apenas y lo hacía, pero tenerla en la misma habitación era algo.

-Dios...

7 años de relación, de su primera y única relación eran difíciles de borrar. Siempre que creía que estaba bien, no era cierto, pero no podía dejarse superar por ello, debía ser racional, ya tenía 27 años, una hija a nada de cumplir 4 y también...

-¿Karina?

-¿Eh?

Winter se estaba secando el cabello de pie mientras la miraba con su ceño fruncido. Karina mordió su labio.

-¿Todo bien?

No.

-Supongo... yo tengo una pregunta, buen, un par de ellas.- Minjeong la miró fijamente e hizo una seña para que hablara.- ¿No piensas dejarme? Nuestra relación no fue algo totalmente bueno, y yo aún no sé qué tipo de persona eres.

Escuchó un suspiro, y luego a Min dejar la toalla de vuelta en el baño, todo ese tiempo, que fue breve, se sintió mal para Karina, ¿por qué le había dicho eso? Se había arrepentido, pero no esperaba que Winter realmente le respondiera.

-Aún te amo. Dije que lo haría hasta el día que muriera, Jimin. Lo prometí.- Explicó, su voz profunda por hablar más bajo de lo usual. Parecía avergonzada, cosa que Karina no supo explicarse por qué.- Soy el tipo de persona que hará todo por protegerte y enseñarte cuánto te ama.

No volvieron a retomar el tema luego de eso, Jimin no se atrevió a seguir preguntando, le había generado más dudas sobre qué hacer con Minjeong.

...

Un peso muerto sobre su brazo hizo que MinJeong comenzara a despertarse, estaba siendo incómodo. Sin embargo, no pudo retirar su brazo con facilidad.

Abrió sus ojos irritada mirando a su lado a Jimin dormida plácidamente, resopló y no intentó moverse para nada, tuvo que ignorar la sensación de hormigueo en su brazo, no quería despertar a Jimin, menos ese día, ella debía irse ese día.

Jimin en toda esa semana no sacó el tema de conversación, y de hecho, por tres noches seguidas fue por Minjeong hasta la sala de estar para que durmiera en su cama. Min podría estar feliz, pero sabía que algo no estaba bien en todo eso, conocía tan bien a Jimin que actuar de esa manera ya era una alerta de que algo saldría mal.

-¿...Jeong? ¿MinJeong?

La rubia no miró a Karina y solo hizo un sonido con su garganta, haciéndole saber que la estaba escuchando. En realidad, no lo hacía, su mente estaba trabajando tan temprano que poner atención a dos cosas al mismo tiempo le era imposible.

Pero lo que dijo Karina captó su total atención, ignorando sus pensamientos previos.

-Hoy deberías irte, ¿no es así? - Lo soltó con su voz adormilada. El silencio asentó el lugar y se quedó por un rato.- Pero no quieres hacer eso, lo sé, te conozco como tú a mí.- Y como si leyera su mente, concretó su oración con la duda que despertó el cerebro de Minjeong tan temprano.- Sé que estás pensando algo malo de esto, te conozco. Esa mirada que cargas desde hace días es obvia, y Min -se estiró hasta quedar con su rostro cerca del rostro de la menor.-, tienes razón. No confío en ti.