Psycho || WinRina G!P

[52]

—Señorita Yoo, ¿Podemos hablar un momento?

Jimin se detuvo junto a Haewon y asintió mientras le decía a su hija que fuera a jugar afuera del salón.

Tomó asiento y escuchó a la maestra de Haewon, enseñándole varios dibujos no tan alentadores de su hija y de repente uno llamó su atención.

La señorita Minatozaki tomó específicamente ese dibujo y se lo enseñó a Jimin—. Haewonnie, mencionó que usted había llevado a alguien que jugaba con ella y que la hacía a usted feliz — Jimin sintió su pecho contraerse—. Su estado de ánimo en clase mejoró bastante, y quizá el dibujo no es tan claro, pero es usted, esa persona y ella.

Señaló cada una de esas pelotas con palos, la de en medio era sin duda Minjeong.

¡Incluso le dibujó una cara seria!

Jimin aguantó una risa—. S-sí, es... bueno —miró los ojos juguetones de Sana y se puso nerviosa—. No es lo que cree, es una amiga mía, y bueno, solo...

"¿En serio? ¿Un gay panic a tus 27 años?" Jimin se lamentó internamente.

Sana negó riendo—. No se preocupe, solo quería mencionarlo. Me pareció que debía saberlo —luego sus ojos miraron a Haewon en una banca a lo lejos sola mientras veía sus manos, luego una niña de cabello corto se acercó y comenzó a hablarle—. Estaba algo preocupada porque ella solía estar extremadamente callada durante las clases, pero desde este dibujo, ella incluso hizo una amiga, habla más en clase, y trata de leer, bueno, lo que sea que esté haciendo, lo está haciendo bien, señorita Yoo.

Jimin no supo qué responder. Ahora mismo todo parecía estar a favor de su no-relación con Minjeong, ella incluso se estaba convenciendo de eso.

No había mucho que hacer, de todos modos. Minjeong siempre la encontraría.

Suspiró y miró a Minatozaki con una sonrisa tranquila—. Gracias, en verdad lo aprecio.

Sana asintió, y luego de una explicación sobre algunas actividades escolares, ambas se despidieron.

Cuando salió no vio a Haewon. Entró en pánico breve hasta que la escuchó gritándole a un niño que la soltara. La tenía de una de sus trenzas.

Jimin fue hasta allá muy enojada.

Se detuvo en seco cuando su hija le tiró un jugo encima de su cabeza y luego le mordió el brazo.

—¡Oye!

Iba a irse contra Haewon cuando Jimin se interpuso.

Miró a Jimin enojado—. ¡Ella me mordió!

Haewon, detrás de su madre, le gritó—. ¡Se lo buscó!

Acababa de escuchar cosas buenas de su hija y ahora pasaba esto. Nunca tendría un día tranquilo.

—Haewon, disculpate.

Jimin, internamente, estaba a favor de lo que hizo su hija, no iba a reprenderla. Pero estaban en una escuela, tenía que terminar rápido toda esa situación. Habían dos madres mirándola fijamente.

—¡No!

—¿Qué...? —Vio a Haewon ahora a su lado, muy molesta mientras negaba con su cabeza. Mierda que era un poco divertido ver que su expresión enojada era un poco como la de Minjeong (menos terrorífica, por supuesto). No quiso insistir— Está bien, solo vam-

—¡No es justo!

—Tú le jalaste su cabello sin razón, ella simplemente se defendió— explicó breve. Ya no había nadie cerca, así que no habría necesidad de seguir ahí fingiendo que estaba molesta por lo que hizo su hija.