Psycho || WinRina G!P

[55]

Dos semanas, le tomó dos semanas a MinJeong juntar toda la información posible del tipo que estuvo detrás de Jimin.

Haewon le ayudó, solo tuvo que decirle que era para proteger a su mamá e hizo lo que pudo aprendiendo nombres. Además fue por ella que Minjeong retomó el tema, Haewon le contó molesta que ese niño le había metido arena en su mochila y su padre seguía molestando a Jimin.

Para tener 4 años hablaba demasiado, un poco agotador para Minjeong que no le gustaba la gente que hablaba tanto. Lo cual era gracioso, Jimin era de ese tipo de persona.

Está vez le pidió ayuda a Taeyeon, no quiso hablar con YunJin, estaba teniendo una corazonada de que probablemente le estaba contando todo a Yizhuo. No quiso arriesgarse, además Taeyeon era muy buena encontrando información personal en redes, así encontró en tres días el Instagram de SeungWan luego de verla en la facultad.

Una habilidad muy útil.

Minjeong siguió al tipo varias veces, durante las horas que tenía sola en casa. Descubrió que saliendo de su casa, dejaba a su hijo e iba a otro lugar que claramente no era su trabajo.

Hace tres días quiso mandar todo al carajo y mejor ir a la opción fácil que era YunJin, pero Taeyeon le consiguió a otra persona; Kang Seulgi, mejor amiga de Wendy y algo nerd con las computadoras.

No tardó en darle todo lo que quería, sin nada a cambio, lo cual sonó extraño, pero Taeyeon le aseguró que lo hacía por diversión y emoción, además como no era algo tan grave le daba lo mismo, solo había conseguido conversaciones de ese sujeto con cuatro chicas diferentes y cuadrado los lugares en donde se veía con ellas.

Minjeong se asqueó, y le gustó más la idea de ser ella quien le diera todas las pruebas a su esposa. Quizá estaba haciendo un favor extra, pero le prometió a Jimin no golpear a nadie, esto solo era un golpe con guante. Nada directo.

Miró el USB con la información en su mano y luego a Jimin durmiendo en la cama. Besó su frente y se fue un poco distraída, no quería realmente hacer eso, pero ya había llegado muy lejos.

Cuando salió de la habitación dudó un momento.

¿Karina seguía durmiendo, no?

Miró detrás de ella sin fijarse en sus propios pasos, resbalando con un crayón en medio del pasillo, golpeándose la frente con el vidrio de un espejo.

—¡Mier-

Se tapó la boca con ambas manos mientras evitaba hacer más ruido del necesario. Miró detrás de ella y no vio nada, no escuchó a Jimin tampoco.

Esperó casi 10 minutos en silencio y nada. Suspiró y terminó de irse al colocarse sus botas en la puerta de la casa; subió su cubrebocas mientras caminaba y acomodó mejor su gorra.

Confirmó su pequeña investigación y no notó a nadie entrando ni saliendo, la luz de la sala seguía encendida, aunque eran ya casi las 2:00 a.m.
Su esposa probablemente trabajaba hasta tarde o no podía dormir sin él.

No le interesaba, ni siquiera leyó completo el nombre de la chica, sólo sabía que era siete años menor que él y tenían un hijo, al que hizo que Haewon le pegara un chicle en el cabello hace dos días.

Sonrió recordando a su hija contarle en secreto todo eso. Después de todo si no fuera por ella no tendría idea de quién era él y Jimin no le hubiera dicho de todos modos, solo cuando tenían sexo parecía acceder a todo, pero tan pronto terminaban le daba su clásico sermón de por qué no debía meter sus manos en eso.

Era molesto.

Envés de tocar el timbre, decidió tocar la puerta, dando golpes con sus nudillo cada 3 segundos hasta que una chica castaña, más baja que ella abrió la puerta con su cara enojada.