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Un día después.
















Lo último que recordaba era el largo abuso sexual que tuvo, el tipo salió unos minutos de la habitación, pensó que ahí había acabado todo, pero su miedo incrementó y su tortura siguió cuando el hombre volvió a entrar por órdenes de los Choi.

Había caído desmayado la cuarta vez que su cuerpo fue utilizado por el desconocido, no supo cuántas veces fueron después de eso, no supo más nada de si mismo, hasta ahora.

Despertaba con el cuerpo entumecido, en una superficie cómoda.

—BeomGyu... Mi niño, BeomGyu —escuchó el eco de la voz de la señora Che, soltó un quejido antes de abrir los ojos.

Enfocó a la señora Che, la mujer lo sujetó de las mejillas con suavidad.

—Mi niño... Que bueno que despertaste —le dijo abrazándolo con cuidado, BeomGyu le correspondió.

Se sintió aliviado al reconocer su habitación, la que compartía con TaeHyun.

—Señora Che... —murmuró hundiendo su cara en el hombro de la mujer.

Sus heridas habían sido curadas, tenía vendas, estaba con un cambio de ropa, su cuerpo estaba limpio.

—¿En dónde está TaeHyun? —preguntó levantándose con ayuda de la mujer, su pierna derecha dolía cuando la apoyaba por las heridas, caminaba con dificultad.

—Está en una reunión con los guardias y el servicio en el salón principal —explicó. BeomGyu relamió sus labios.

Ya estaba a salvo, estaba en casa.

Pero necesitaba ver a TaeHyun.

—Vamos hacia allá —ordenó caminando a la par de la señora Che, apoyándose un poco en su hombro.

Caminó con un quejido, se detuvo en el borde de las escaleras, TaeHyun volteó de inmediato a pesar de que no dijo ni una palabra.

—¿En dónde estabas? —preguntó BeomGyu bajando poco a poco las escaleras, TaeHyun ladeó la cabeza, los guardias se quedaron en silencio, haciendo una reverencia educada cuando BeomGyu terminó de bajar las escaleras— Te pregunté, ¿¡En dónde estabas!?

—¿Por qué me reclamas algo así? —preguntó TaeHyun con el ceño fruncido, BeomGyu relamió sus labios, soltó a la señora Che para caminar el solo, quedándose frente a TaeHyun.

—¿¡Qué te tomó tanto tiempo!? ¿¡Por qué tardaste tanto!? —le preguntó empujando un poco su pecho, TaeHyun frunció el ceño.

—¿Cómo que tanto tiempo? ¿Crees que estaba aquí muy tranquilo acaso? —le preguntó de vuelta. Toda la mansión estaba en silencio, los guardias tensos, sin moverse de su lugar, HaeChan rodó los ojos escuchando a los esposos.

—¡No me importa si estabas tranquilo o no! ¿¡POR QUÉ TARDASTE TANTO!? —le reclamó con los ojos cristalizados.

—Tenía cosas que hace-... —el vampiro ladeó la cabeza cuando la palma de su esposo impactó en su mejilla, hubo un silencio tenso, los guardias se sintieron incómodos. La señora Che desvió la mirada.

—No me importa, TaeHyun... —habló entre dientes, soltó un par de lágrimas, TaeHyun volteó a observarlo con seriedad, relamió sus labios— N-no me importa si tenías cosas que hacer... ¿No me amas acaso? ¿No soy tan importante? —preguntó. TaeHyun lo sujetó de los codos con suavidad, besó la punta de su nariz antes de hacer la misma acción de antes, sus rodillas tocaron el suelo, sus manos se quedaron en su regazo, BeomGyu lo observó.

Blood Deal || TaeGyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora