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Jimin observó la figura de su pareja y no dudó en morder su labio con ligereza

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Jimin observó la figura de su pareja y no dudó en morder su labio con ligereza. No podía creer lo afortunado que era al mantener el amor de alguien tan cálido, detallista y guapo como Jeon, pero terminó aceptando que el destino fue el causante de unirlos después de relaciones rotas y vacías. La sonrisa de Jungkook lo recibió unos cortos intervalos antes de observar como este se acercaba para plantar un beso en sus labios, uno profundo y con demasiado amor de por medio.

—Volveré antes de la cena, cariño —los labios del mayor se pasearon por su rostro, causando una risita en el rubio, quien se sentía completamente adorado por el castaño.

—Me siento un poco celoso por esto —un puchero involuntario se instaló en sus labios—. No es justo que pases más tiempo con mi mejor amigo que conmigo.

—Pero, ¿qué dices? Si pasamos todo el día juntos cuando no estamos trabajando.

—No es suficiente para mí, quiero estar contigo más tiempo.

Jungkook volvió a sonreír cuando sintió los brazos del más bajo rodearlo, su insistencia por pasar más tiempo juntos era verdaderamente adorable y no podía estar más de acuerdo con él, pero en aquella ocasión, no podía posponer más tiempo su salida con Taehyung. Por mucho que le gustara la idea de quedarse al lado de su pareja y consentirlo todo el día.

—Yo también deseo estar más tiempo contigo, pero ya se acerca año nuevo y Taehyung desea comprar regalos para Hoseok, por lo que no pude negarme a su petición.

—¿Y por qué no me lo pidió a mí?

—Porque yo conozco demasiado bien a su esposo —Jungkook volvió a dejar pequeños besos en su abultado labio inferior—. Cenaremos juntos, ¿de acuerdo?

—Bien.

Jimin terminó accediendo y le brindó un último beso de despedida. Le encantaba ser mimado por el mayor, no podía negarlo. Jungkook era demasiado dulce cuando se trataba de él, así que no era malo aprovechar un poquito aquella cualidad de su pareja. De todas maneras, Jimin necesitaba ir al médico aquella tarde, por lo que no retrasaría más a su novio y dejaría que fuera con Taehyung al supermercado.

Con un último beso, ambos terminaron despidiéndose y prometiendo que cenarían juntos. Jungkook haría la cena aquella noche y el menor estaba encantado con la idea de probar lo que su novio había planeado para él. Viéndolo partir de casa, se mantuvo sereno pensando en el progreso que habían mantenido los últimos meses, después de su reconciliación. Tal vez, la vida estaba dándole una tregua para mantenerse feliz con la persona que amaba.

Solo esperaba que durara un poco más.


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Love is not over ; kookmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora