❀ Jeon Jungkook y Park Jimin desconfiaron el uno del otro y terminaron con su matrimonio de manera inesperada y dolorosa. Un año después de la separación, Jimin se encuentra comprometido con otro hombre y Jungkook lejos de Corea. ¿Qué pasará cuando...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Un suspiro cansino salió de sus labios cuando pudo sentarse en el sofá y descansó un poco de todo el ajetreo en los últimos días. Dejó el móvil en el reposabrazos mientras cerraba los ojos y trataba de encontrar unos minutos para descansar. La soledad de la mansión era algo a lo que estaba acostumbrado, pero no quería que sucediera en esas circunstancias; no cuando su cuñado se hallaba desaparecido y su hermano sufría de manera incontenible. Jimin estaba esperando un bebé y no podía vivir emociones cambiantes o profundas, como lo que ocurría actualmente; pero, no podía detenerle. Jimin, desgraciadamente, era alguien que se manejaba solo y no iba siguiendo las reglas de los demás. Él iba a movilizarse hasta el fin del mundo, sin escuchar algún consejo, si eso podía devolverle a su prometido.
—¿Señor Park? —Namjoon abrió uno de sus ojos para observar a la sirvienta que le había llamado segundos atrás—. Disculpe la interrupción, pero alguien ha venido a buscar a su padre.
—¿Quién es?
—Es el señor Sehun.
Namjoon frunció el ceño al saber sobre su presencia dentro de casa, pero no podía echarlo sin más, pues sería demasiado grosero de su parte. Estaba seguro de que Sehun estaba allí solo por Jimin y no por su padre, por lo que iba a disfrutar mucho diciéndole que no se encontraba y echándole de manera sutil.
—Hazlo pasar.
La sirvienta asintió levemente y fue directamente hacia la entrada de la mansión. Sehun apareció en su campo de visión con elegancia, como acostumbraba, y una pequeña mueca en el rostro. Parecía preocupado por algo, cosa que confundió al mayor de los Park, pues no parecía fingido. Era una preocupación genuina. ¿La razón? Solo él sabía.
—Buenas tardes, Sehun —saludó con una pequeña sonrisa— ¿Qué te trae por aquí?
—He venido a entregarle estos documentos a tu padre —el azabache le ofreció una carpeta de documentos, los cuales parecían ser muy importantes—. Mi padre no podrá ir hoy a entregárselos personalmente, por lo que me mandó a mí.
—¿De qué tratan?
—Son los negocios de Busan. Varios empresarios han brindado diversos pedidos para realizar construcciones en esa ciudad. Mi padre está esperando la confirmación del señor Park para iniciar con los trabajos.
—Ya veo —murmuró el mayor de los Park mientras revisaba los documentos—. Mi padre salió al hospital, así que no estará en la empresa hasta el día de mañana. Por el momento, me encargaré de esto y se lo haré saber lo más pronto posible.
—¿Le ocurrió algo malo?
—Taehyung dio a luz —dijo con simpleza—. Toda la familia se encuentra allá.
Sehun pareció entender sus palabras, por lo que terminó asintiendo mientras revisaba la hora en su reloj.
