Sucesos ocurridos despues de la pelea contra el juggernaut, todo transcurre normalmente hasta el momento en el cual, bell tiene que volver a ver a Ryuu en la señora de la abundancia.
Bell conocera a alguien de su familia, Luchara contra Evilus, Pen...
En la entrada de Orario un Guardia de Ganesha hacia su rutina diaria Verificando a los viajeros que últimamente han ido aumentando de numero, dándole mas trabajo al Miembro de ganesha
Todo iba normalmente, como siempre, pero en su camino en la entrada Sur de la ciudad (Por donde entro Bell cuando llego), un joven identico a el aparecio, Bell se hizo de renombre cuando lucho contra Asterior, por lo que el Guardia pregunto extrañado.
Guardia 1: Bell? *Sorprendido*
Leo Cranel: No soy Bell, Podria mantener mi nombre en secreto?, no vengo con malas intenciones a la ciudad, solo vengo a de visita.
Guardia 1: De casualidad eres Familiar de Bell Cranel?
Leo Cranel: No, No lo conozco, porque?
Guardia 1: N-no por nada.
El guardia miraba con asombro el parecido de el con Bell, pero había detalles que denotaban que no era el, el tenia una mirada mas Varonil, ojos de distinto color, aunque uno era de un color rojizo al igual que Bell, pero no exactamente el mismo brillante color, si no, uno mas apagado, uno mas triste...
Cabello Blanco, complexión ni delgada ni Robusta
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Guardia 2: Portas alguna arma ? *Preguntaba una chica Pallum que al Oler al sujeto supo que había algo raro en el*
Leo Cranel: Si, porto una Espada, es para defenderme mas que otra cosa.
Guardia 2: Ya veo, aun así, me gustaría que la dejaras por seguridad.
Leo Cranel: Por supuesto *Le da la espada al Guardia 1*
Guardia 2: Disfrute su estancia en Orario
Leo Cranel: muchas gracias. *Se despide con una sonrisa*
Guardia 1: Se parece demasiado a El.
Guardia 2: Si, pero algo me da mala espina.
El joven al entrar, noto que muchas personas empezaban a verlo con asombro, cosa que para el joven le pareció indiferente, el no estaba para sentir sus miradas, el caminaba recto y con actitud de autoridad, extraño para todos, porque estaban acostumbrados a ver al único peliblanco como un pequeñito conejo, en cambio este era como un Lobo Albino Feroz.
Dentro de las calles, noto que un olor entraba por su nariz, uno dulces y sabroso, combinado con cierta tranquilidad que emanaba una posada, al llegar, noto como unas chicas sorprendidas lo miraban.
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