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Kurt.

Estoy preocupado.

Ha estado en silencio desde que nos subimos al auto. Se suponía que esta noche iba a ser ardiente, pero no lo fue.

Y aunque estoy deseando reclamar cada parte de su cuerpo, no me molesta esperar.

El tiempo no es un problema, al menos no para mí. Y estoy dispuesto a esperar por ella.

Probablemente, esto sea algo de una sola noche, pero sé que si espero valdrá la pena.

Esta mujer tiene algo.

No sé con certeza que es, pero ese algo me vuelve loco.

Coloco mi mano en su muslo y me dedica una mirada.

-¿Estás segura de que estás bien?-Pregunto por tercera vez solo para asegurarme.

-Sí, es solo que tengo un presentimiento, y no sabría identificarlo si es bueno o no.-Apoya su mano en la mía.

Estacionó mi vehículo fuera de la comisaría.

No he querido preguntar, no quiero parecer insistente ni mucho menos metiche, pero tengo que admitir que la intriga me está matando.

-Bien, te puedo esperar acá si así lo deseas.-Mi boca dice eso, pero mi mente me exige que la acompañe.

Puede haber algún bandido ahí dentro, y no arriesgaría a ponerla en peligro.

De verdad me gusta.

Sé que una sola noche no bastará, pero eso lo decidirá ella más adelante.

-¿Me puedes acompañar por favor?

Luisa.

-Claro.-puedo ver cómo reprime una sonrisa.

Él se baja del auto y me indica que espere. Da la vuelta al auto y me abre la puerta.

-Gracias... ¿Pero sabes que también tengo dos manos funcionales y puedo abrir la puerta, yo sola cierto?-Agrego fingiendo molestia, mientras bajo del auto, tomando la mano que me tendió.

Me encanto lo que hizo, pero creo que sería divertido probarlo...

¿Me podría manejar cuando estoy enojada?

No lo sé.

Espero que sí.

Aunque dudo que eso sea posible, es mi última noche aquí. Y no logré hacer nada con el más que sentarme en su regazo

-Claro que lo sé, pero preferiría solamente tus manos sean ocupadas con mi po...-le tapo la boca con mi mano para que no continue y me guiña el ojo y en consecuencia me sonrojo.

No soy una santurrona, pero por algún motivo él hace que me alborote en todos los sentidos.
Me encanta que hable así...

-Vamos.-Le digo fingiendo que no me importaron sus palabras.

-Te ves tierna cuando te sonrojas.-Comenta mientras camina a mi lado.

Dios.

Maldito hombre, es adorable y caliente.

¿Qué más puedo pedir?

Cuando llegó al interior de la comisaría, pregunto por el nombre de mi amigo.

-Sí, está en el calabozo por disturbio público, se colocó a pelear con otro tipo en plena fiesta.-añade el policía.-Él queda libre bajo fianza...

-¿Cuánto es...?

-¡Luisa!-la voz de Louis me desconcentra-¡Estoy acá atrás tuyo!

Me doy vuelta y logro ver la celda. Está con un tipo calvo lleno de tatuajes, más al lado puedo ver qué hay un hombre durmiendo y...

Riley.

¿Este psicópata me siguió a Miami?

Dios.

-Ay, no, ¿qué hace el aquí?-susurro y siento la cálida mano de Kurt en mi espalda.

-Lo siento por la pregunta tan repetitiva. Pero ¿estás bien?-susurra y asiento.

Aunque es mentira.

Claro que no estoy bien...

Mi ex está apareciendo para arruinar mi noche, me quede sin mi última noche de diversión y sin sexo con el hombre más ardiente que jamás había visto.
Es imposible estar bien con esto.

Nota: queria darles un cap narrado por el papucho de 😏kurt😏para ver que tal, no se si seguir haciendo mas caps narrados por el pero eso se irá viendo con el tiempo. He tenido fallas con el autocorrector así que si hay fallas, tengan por seguro que las arreglaré mas adelante.

Mi amor, traidorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora