Mi amor, traidor

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Kurt.

El tiempo se me hizo nada, entre ayudar a Riley y organizar el regalo para Luisa, mi tiempo se fue volando.

Sé que tenía que quedarme en casa con ella, pero tenía que ayudar a Riley. Ya que, está luchando contra personas que tienen fuertes conexiones, pero no tan fuertes como las mías.

Luisa y mi hija ya deben estar durmiendo, por lo que no me molesto en hacer mucho ruido al llegar, todo está silencioso.

Subo lentamente a la habitación. No quiero despertar a mi hija, porque se demora demasiado en volver a dormir.

Estar afuera sin mis mujeres, fue una completa tortura.

Al llegar abro la puerta de nuestra habitación.

Para mi sorpresa no hay nadie.

¿Dónde están?

La cuna de mi hija esta completamente vacía, y Luisa no se encuentra.

Las personas que se encargan de vigilar no me han dicho nada.

No sé si Luisa sabe, pero tengo al rededor de veinte hombres en toda la cuadra, que se encargan de vigilar la casa.

Pero no han reportado nada.

Luisa tampoco me aviso que saldría. Aparte es demasiado tarde.

Dudo que esté con Louis porque él estaba conmigo y Riley.

Dios...

¿Dónde esta mi mujer?

Inspecciono la habitación, buscando un indicio de su ubicación. Reviso el baño y me encuentro su celular...

Ya me estoy preocupando.

Ella no sale sin su celular.

Salgo del baño y me percato que en la cama hay un sobre. No sé cómo no lo vi al entrar.

Lo tomo y lo abro.

Es...

Joder.

¿Luisa ha visto esto?

¿Se escapó?

Mierda.

Estoy asustado.

No sé cómo esto ha llegado acá, puede ser que mis adversarios encontraron donde vivo con Luisa...

Eso significa que está en
peligro.
También puede ser que ella después de ver eso se escapó por miedo.

Cosa que también es peligroso. Las personas que me odian están en todas partes, y con tal de hacerme daño son capaz de dañar a una madre y su bebé.

Mierda.

Llamo al jefe de seguridad, que es el que guia a los demás.

Espero a que conteste mientras me dirijo al ver las cámaras.

—Jefe, a sus órdenes, ¿está todo bien?—responde al tercer timbre.

—¿Qué ha pasado?—Pregunto mientras veo el video de seguridad, no lo adelanto. Quiero ver cada detalle.

—Jefe, los chicos han estado sin comunicarse, no es nada grave , suele pasar cuando ellos están...

Dejo de escuchar cuando veo que Luisa en el video recoge el sobre, y luego sube. A los minutos sale con mi hija. Se ve asustada...

Se escapó...

Sigo viendo la cinta, y mi pecho late frenéticamente mientras veo como ella llega nuevamente.

Al parecer ella no quería huir de mí, y eso me reconforta al menos un poco.

Reviso la cámaras de nuestra habitación, que se encuentra ahí específicamente cuando salgo, poder ver que mi mujer esté bien.

Ahí se encuentra mi mujer, haciendo dormir a mi hija.

Los minutos pasan, y Milton, el tipo al que llamé, no ha colgado.

Mi mujer no se acuesta, se queda mirando a mi hija.

Puedo ver como ella se sobresalta de a nada, al parecer escuchó algo.

Se levanta, y veo como su mirada trasmite el temor que sintió al ver específicamente a la puerta.

Ella retrocede a medida que un tipo con un pasa montañas se acerca.

El sujeto se acerca rápidamente a ella, la agarra. Pero Luisa lucha y le da un golpe en la nariz, cosa que lo hace retroceder.

El tipo se recompone rápidamente del golpe, y la toma nuevamente, pero ahora entran más personas.

Joder.

No puede ser.

Mierda.

Unos tipos agarran a Luisa mientras grita y forcejea.

Cierro mi puño ante la rabia, un tipo se atrevió a pegarle.

Joder.

Sea quien sea, lo mataré lo haré suplicar para que lo mate...

Sacan a la rastra a mi mujer de la habitación, seguido de eso veo como otro tipo entra y toma a mi hija...

No.

—¡Mierda!—Grito de frustración y rabia.

—Jefe, ¿está bien?—pregunta.

Se me había olvidado que estaba en llamada aún.

—Se la han llevado, se han llevado a mi mujer y a mi hija.

Nota: fallas por arreglar.
Ya volví jzjdjd disculpen la demoraaa:(