—Hyerim y tú necesitan tener hijos. Los rumores de una supuesta crisis matrimonial van en alzada.
Taehyung había citado a Jungkook para comer juntos. Normalmente lo hacían al menos una vez a la semana para estudiar los futuros proyectos de Jungkook y como Taehyung podría invertir en ellos.
—Créeme que nos esforzamos, pero no es fácil para nosotros. Además, Jang Haneul está siendo molesta estos días. No me sorprendería que sea ella la que vende información a la presa sensacionalista.
—Si quieres obtener la reelección, procura no ridiculizar a mi hermana. Ella es la carta más fuerte que tienes. De Jang Haneul me encargaré yo. Y también, encontré a un buen doctor que se encargará de que Hyerim quede embarazada pronto, en vista de que no puedes hacer algo tan sencillo como eso.
Jungkook se cruzó de brazos y respiró hondo contemplando la figura de Taehyung comer pasiblemente como si encargarse de todos los problemas que los envolvían fuese cosa sencilla, porque él mejor que nadie sabía que Taehyung siempre hacía las cosas a su manera, como todo el tiempo.
Taehyung se abstuvo de cortar el trozo de carne y miró a Jungkook a los ojos soltando una risa estruendosa.
—Tranquilo hombre, esta vez lo haré diferente. Resulta que yo también necesito de una esposa e hijos que puedan seguir con el legado de mi padre.
—Tú padre decía que no salía con actrices.
—Ni con políticos. Sin embargo, se casó con mi madre y Hyerim se casó contigo. Así que agradece el hecho de que seas mi amigo, porque mi padre jamás te hubiese entregado a mi hermana, ni por error.
Taehyung hirió el orgullo de Jungkook recordándole una vez más que Hyerim estaba a su lado gracias a él, porque el destino de la chiquilla pudo ser a lado de otro hombre que Jaesang hubiese elegido para su única hija, sin embargo, la muerte lo sorprendió antes de tiempo.
—Desdichado sea Kim Jaesang, porque sus nietos llevarán mi apellido.—Jungkook espetó con suficiencia.
Taehyung se limpió la boca con una servilleta sin perder esa elegancia que lo caracterizaba, pero casi al instante abandonó toda mesura lanzado la misma servilleta sobre la mesa haciendo evidente su estrés y malhumor.
—Parece que la idea de ser el padre los hijos de Hyerim te emociona demasiado, porque eso significaría que aún si se divorcian, jamás dejarás de ser parte de nosotros, pero ¡Oh sorpresa! resulta que mi hermana y tú llevan casi cuatro años intentando quedar embarazados y le has hecho creer que ella es el problema. Como sabes, soy un hombre que no me ando por las ramas y me gusta tener siempre la certeza, pero da la casualidad de que Hyerim está en perfectas condiciones... no será que el problema venga de otra parte. Al igual que mi padre, también me importa nuestro linaje y si Hyerim no consigue tener un hijo pronto, tendrás que renunciar a ella.
Jungkook palideció al escuchar las crueles palabras de Taehyung y como para él resultaba fácil deshacerse de todo aquello que no le fuese útil, como simples productos que tiras a la basura una vez que cumplen su función.
Si bien, Taehyung y Na Hyeseong no dudaron en darle la mano de Hyerim, obteniendo así muy rápido el voto de confianza para casarse con ella, quien le asegura que tampoco dudarían en retirarle su apoyo si no era capaz de hacer feliz a la hija más pequeña de los Kim. Por casi cuatro años Hyerim ha manifestado su deseo de ser madre, e incluso se sometió a varios tratamientos, pero a este punto, la mujer ya parecía haberse rendido ante la nula posibilidad de quedar embarazada, y los miedos de Jungkook por algún día tener que renunciar a la única mujer que ha amado, representaba una piedra en su zapato.
ESTÁS LEYENDO
Somebody else
FanfictionHyerim y Jungkook eran la pareja perfecta, unidos por un lazo que ambos construyeron desde que eran unos niños y creían que ese amor era para toda la vida, pero la llegada de un hombre puso en duda todo aquello que se juraron alguna vez.