Veintiocho

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Días antes

—¿Has encontrado algo?—Jimin le preguntó a Namjoon, quien rápidamente le entregó una serie documental interesante.

—Me costó un ojo de la cara, pero leer esto.—Namjoon levantó el sobre con la recopilación confidencial.—Vale la pena. Creerás que es toda una odisea mientras la lees.

—¿Algún resumen que me puedas dar?

—Organización Eul.

—¿Qué es eso?—preguntó Jimin con rostro impasible.

—Son un grupo de millonarios y políticos de alto rango, entre ellos figuran Min Yoongi, el mismísimo presidente del país y Kim Taehyung. Digamos que su labor principal es dedicarse a la beneficencia con tintes religiosos. Lo cierto es que lavan mucho más dinero de lo que puedes imaginar. Obviamente hay un amplio concurso de delitos, entre ellos favores sexuales que Taehyung y Yoongi orquestan perfectamente bien.

—¿Qué hay de Jungkook?

Jimin parecía más impaciente por escuchar la suciedad que podría salpicar a Jungkook y tomar ventaja de eso.

—Sorprendentemente Jungkook no está involucrado en la práctica de estos negocios ilícitos. Al parecer los principales involucrados son Yoongi, Taehyung y otros más, pero en serio tú de verdad no te puedes imaginar, es toda una mierda que...—Namjoon dijo exasperado.

—¿Entonces por qué carajo dijiste primero que Jungkook figura ahí?

—Es que esa esa la mejor parte, ese tipo es un verdadero genio. Su única función es ser el presidente y tener todas las carpetas de investigación de la fiscalía perfectamente guardadas. Lo que significa que es más peligroso de lo que otros pueden dimensionar, porque es evidente que en el momento en que Jungkook lo decida, todos se irán a carajo.

—Dudo que le convenga que las verdaderas prácticas de esta organización salgan a la luz, es como ponerse la soga al cuello el mismo porque si o si lo van a vincular.

—Podemos filtrarlo a la prensa.

No. Esperemos un tiempo más.

Sin embargo, los planes de Jimin por filtrarlo a la prensa se vinieron abajo cuando la misma anunció la orden de aprehensión en contra de Min Yoongi. Lo sorprendente, fue que el mismísimo Jungkook haya sido la mente maestra detrás de la tan perfectamente elaborada persecución judicial.

¿Qué cambió de repente?

Aquel movimiento del presidente sacudió a todos los integrantes de la organización Eul. Porque eso significaba que ya nada estaba garantizado para ellos, y que su siguiente presa era Kim Taehyung.

—Si Yoongi era considerado amigo de Jungkook, porque razón haría algo que definitivamente mancharía su reputación.

Jimin le preguntó a Namjoon sin entender las intenciones de Jungkook, lo que demostraba una inestabilidad incluso para sus propios planes, porque cambia completamente el rumbo de ellos.

—Taehyung y Yoongi son peces gordos, probablemente sin ellos Jungkook pueda obtener el control de Eul.

—El primer paso para exponer a Eul ya ha sido dado por Jungkook, es evidente que no busca monopolizar el negocio. Así que nosotros nos encargaremos de saber que pretende exactamente. Pero antes, deja de subestimar al presidente del país.—Jimin aseveró.

[••••]

Presente

Jimin estaba a punto de meterse a la cama, cuando recibió la llamada de un número desconocido, prefiriendo desviarla, pero el llamante era muy insistente que no tuvo más remedio que atenderlo de mala gana.

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