Doce

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—Vámonos.—Jimin le ordenó a uno de sus escoltas que echara andar el automóvil mientras el hombre se perdía observando a los grandes rascacielos de la bulliciosa ciudad, y a medida que avanzaban, ambulancias y cuerpos de seguridad se dirigían en sentido contrario.

Así que sonrió con suficiencia al suponer que su trabajado estaba más que hecho con Taehyung.

Sin embargo, su chofer por alguna extraña razón comenzó a sintonizar la radio para apaciguar el amargo silencio del trayecto, cuando los oídos de Jimin escucharon algo que lo dejaron helado.

"El gran concierto de las lunas termina en caos, la familia presidencial sufrió un atentado y la primera dama resultó herida de bala"

De repente, el ambiente se volvió tenso entre los dos hombres al escuchar la noticia que tenía a todos consternados.

—¡Oh, no, no, no, detén el maldito carro!

Jimin revoloteó sus cabellos desesperado por saber más de lo que por error terminó arrastrando a Hyerim. Y se dio cuenta muy tarde de que se había dejado llevar por sus emociones irracionales.

—Regresemos. ¡Date prisa!

El señor Choi nunca había visto a un Jimin así de mortificado por otra persona que no fuese él mismo. Era absurdo qué haya perdido el control a causa de la primera dama, pero de cierta manera no conocía bien los negocios de Jimin y tampoco le apetecía saberlos. Así que dejaría de señalarlo, y fiel a su encomienda, dio marcha al lugar del atentado.

Regresando, el auto de Jimin fue interceptado por un automóvil de lujo negro.

—¿Qué pasa?—preguntó exasperado.

—Namjoon.—el señor Choi respondió cansando.

De pronto, la puerta trasera del auto de Jimin fue abierta con violencia dejándose asomar a un corpulento hombre con expresiones severas.

—¡Bájate!—demandó Namjoon arrastrando a Jimin con él y otros podrían apostar a que se trataba de una posible emboscada, pero en realidad Namjoon lo único que pudo hacer fue buscar a su amigo luego de escuchar las noticias, porque supuso que esto era obra de Jimin.

—Quiero creer que perdiste la cabeza. Sabes lo que pasará si Jungkook o Taehyung se enteran de que fuiste tú. Oh, yo te lo diré, te van aplastar como una hormiga ¡Hyerim fue herida de bala! Y Jungkook está por perder la cabeza si no encuentran al responsable.

—Me importa un carajo lo que Jungkook haga o deje de hacer, necesito ver a Hyerim y asegurarme de que está bien.

—Eres mi amigo, pero honestamente creo que eres un poco imbécil ¿Ir a Hyerim? ¿Acaso quieres morir? Agradece que solo fue un roce de bala en el brazo y que esto haya quedado como un atentado.

Jimin exhaló con calma al escuchar a Namjoon informarle sobre el estado de Hyerim.

—Está bien. Me dejé llevar, estaba tan molesto de la perfecta vida de Jungkook y Taehyung que lo único que pensaba era en aplastarlos, pero calculé mal.

—Jungkook está cabreado. Te has metido con su mujer ¿Sabes lo peligroso que se vuelve ese hombre cuando se trata de Hyerim? Quería arrancarles la cabeza a todos los cuerpos de seguridad.

Jimin leyó muy bien las expresiones de Namjoon y parecía no mentir en ninguna de las oraciones, y aún así no se quedaría quieto.

—Tengo que verla y no te estoy pidiendo permiso.

—Jimin, necesito qué dimensiones bien lo que acabas de hacer. Literalmente pateaste la jaula de los Kim y Jeon, así que primero debemos deshacernos de toda la evidencia que te comprometa, porque ahorita Kim Taehyung debe estar moviendo todas sus conexiones para hallar al culpable.

Somebody else Donde viven las historias. Descúbrelo ahora