ONE SHOTS-ˢᵖⁱᵈᵉʳᵛᵉʳˢᵉ

063- °MIGUEL O'HARA°

—Ataduras—
—Pedido de  @engeers_rossis—
—+18—

Protagonista: Aline/ 27 años.

La relación que tenían era bastante discreta. Pero cuando los días se volvieron más complicados la relación entró en un punto de frialdad y desinterés en lo que tenían.

Empezaron a distanciarse involuntariamente.

—¡No puede ser! — Aline sonrió al ver la impresión de Miles, quien estaba sentado frente a ella.

Miles, Gwen, Hobie y Pavitr, habían organizado una pequeña reunión.

El cabello ligeramente abultado y largo, un par de perlas intensas, atractiva y joven.

Cuando se conocieron, Miles y ella habían notado que tenían algunos gustos en común pero ahora, después de hablar por más de dos horas, llegaron a la conclusión de que eran iguales.

—¡Metro Boomin es genial! — Terminó ella mientras que Miles le miraba con felicidad.

Aline pensaba que era muy simpático sobretodo un chico muy culto, sabía de arte, cine y tenía un increíble gusto musical.

El joven y ella se acercaban cada vez más intercambiando infinidad de comentarios a cerca de lo compatibles qué eran.

Sin embargo, había solo un problema.... Miguel.

—Eso no es sano Miggy— Dijo Layla con una sonrisa ladina, Miguel observaba la reunión a través de la pantallas en usa oficina, muertos de celos.

...

La mujer de piel ligeramente morena, despertó con un insoportable dolor de cabeza.
Miró el entorno, recodando en fuerte golpe que había recibido minutos antes.

Intentó levantarse sin éxito alguno, tiró de sus muñecas, las cuales fueron tomadas con más fuerza por unas cuerdas qué apretaban sin ningún cuidado.

Volvió a jalar ocasionando una fuerte presión contra las venas de esa parte del cuerpo.

Se sintió vulnerable, los pies y manos estaban atadas, Aline liberó un pequeño gruñido al no saber que hacer.

Intentó con más fuerza desatarse, sin tener alguna salida.

Sus movimientos se detuvieron al ver que su pareja entraba a esa habitación.

Ella le miró sin saber muy bien la razón de porque estaba ahí, aunque se hacía una idea.

—Hola, mi amor— Saludó ella mirando el semblante serio de Miguel.

—¿De qué hablabas con Miles? — Sus ojos se abrieron un poco mostrando un tono escarlata en los mismos.

—De pintura— Logró sus manos detrás de su cabeza para levantarla un poco. — ¿Por qué?

—¿Solo de pintura? — Miguel se colocó a los pies de la cama mientras la joven asentía.

—Y música, ¿Podrías desatarme ya? — Levantó un poco sus pies.

—Decidiste pasar más tiempo con el que conmigo... — Proceso— ¿Encerio? — Aline notó el tono duro y fuerte de que Miguel usaba.

—Nunca tienes tiempo para tu novia Miggy— Le reclamó, Miguel parecía una bomba, a punto de que su mecanismo estallara.

Mostró sus colmillos abriendo un poco sus labios y acercándose centímetros más.

—Ya no hables— Le ordenó, Aline solo asintió mirando detenidamente el cuerpo de su pareja, sobre todo su entrepierna.

Un silencio de cinco segundos se hizo presente entre los dos.
No era fan de estar amarrada pero no lo odiaba en ese momento.

—Tengo un problema— Murmuró Miguel mientras subía por un extremo. — De allá abajo.

Aline mordió sus labios antes de volver a intentar desatarse, cosa que Miguel impidió rodando sus muñecas con sus propias manos.

...

La habitación se veía sumergida en sonidos qué cualquiera catalogaria como vulgares.

—Carajo— Murmuró Miguel sosteniendo con más fuerza la cadera de su pareja.

Desde hace rato, Aline se habia rendido con respecto a sus agarres, los lazos qué impedían su movimiento habían funcionado para tomarlas con más fuerza mientras se acostumbraba a las fuertes y agresivas embestidas de Miguel.

—Mig... —Sintió otro golpe en su cuerpo, dejando marcas rojas en su trasero.

Miguel tomó los lazos en sus manos y apretó más el agarre debido a que este se habia aflojado con la esfusividad de sus movimientos.

Las paredes vaginales de la mujer de 27 años apretaron con mucho más fuerza el miembro de Miguel, el cual liberó un quejido.

—Amo cuando haces eso— Le susurró acercándose a su vientre y dejando una de las tantas marcas con sus colmillos.

—¡Miguel! — Gritó al sentir un líquido escarlata bajar sobre su vientre.

Antes de que ella pudiera quedarse, Miguel volvió a moverse dentro de la mujer.

Su final estaba cerca, tan cerca qué la joven no podía mirar a quien la tomaba con fuerza.

De vez en cuando, colocaba sus ojos en blanco sintiendo la punta del miembro de Miguel en su punto exacto.

El tono de voz que Miguel usaba era impotente. Habia pensando en todo, pero las marcas sumamente visibles en sus muñecas le hacían dudar.

—Miguel.... — Murmuró ella antes de sentir sus piernas temblar por segunda vez en la noche.

...

✯¡¡¡¡Hola!!!! ✯

✯@engeers_rossis ¿Quieres que le cambie algo? ✯