El teléfono de Pete volvió a sonar mientras ellos estaban abrazados en el sofá y veían algo de televisión.
-Lleva todo el día así.. ¿Quién es?- preguntó cuando el sonido se detuvo.
-..Papá- respondió tomando el aparato y apagandolo.
-Pete.. llevas varios días aquí y me encanta, te amo, es lindo pero.. tienes que volver a tu casa- le dijo acariciando su cabello.
-Es que no quiero escuchar sus malos comentarios ni que insista en querer llevarme a lugares- suspiró.
-Lo sé, pero la solución no es solo irte así sin nada de tu casa.. aún te falta un próximo año en la universidad.. ¿No?- lo abrazó.
-Si..- asintió.
-Sé que no quieres escuchar todo lo que te dice pero debes soportarlo solo un poco, cuando termines y trabajes.. entonces no podrá decirte realmente qué hacer, porque vas a tener como defenderte en la vida- besó su mejilla.
-No lo creo... al final voy a trabajar en la empresa.. seguiré siendo vigilado por el resto de mi vida, eso no va a cambiar- comentó desanimado.
-Entonces tu padre aprenderá, pero por ahora.. puedes decirle lo que piensas y lo que no quieres, aunque lo veas molesto, estoy seguro de que en el fondo te entiende y no te obligará- apretó sus mejillas antes de dar un beso en sus labios.
-Mhh.. es que..- soltó un suspiro- esta bien.. pero no le haré caso hoy.. volveré mañana-
-Bien- volvieron a una posición más cómoda para regresar su atención a la película.
Más tarde Vegas le ayudó a programar la lavadora, dejando su ropa colgada y terminando de secarse.
Salieron a cenar afuera, algo de pizza y cerveza parecía bien, en el caso de Pete alguna otra bebida de coctelería.
Regresaron para tomar su respectiva ducha antes de ir a dormir, por hoy no había acción, al parecer tuvieron mucho de eso los días anteriores, la espalda de Pete comenzaba a doler un poco, optaron por descansar esta vez.
-¿Qué quieres papá?- respondió finalmente Pete mientras guardaba sus cosas la mañana siguiente.
-¿Dónde estás? Ya te duró demasiado el berrinche.. tienes que volver- le dijo con voz firme.
-Soy un adulto y estoy de vacaciones, puedo estar donde yo quiera- contestó irritado.
-No, no funciona asi.. vives en mi techo y con mis reglas, te quiero de regreso ya- volvió a decir con firmeza.
-Iré en un rato pero no por ti.. al contrario de lo que piensas quien me convenció de que es lo mejor.. fue mi novio que no te agrada- tomó sus cosas de cuidado personal para guardarlas también.
-Seguramente ya se cansó.. o ya se dio cuenta que tenerte todos los días es demasiado para su bolsillo, no puede darte la vida diaria qué tienes en casa- le dijo su padre.
-No digas eso, estás muy equivocado.. no tienes idea de como funciona- se quejó.
-¿Por que? No me digas.. ¿Te hacía pagar cosas? Es solo un vividor más que espera ver como lo mantienes después Pete.. hijo, tienes que verlo en realidad..- hablaba con voz calmada pero tensa.
-Y tu deberías conocerlo para saber que no es así- dijo de mala gana cerrando su mochila.
-Ni se te ocurra traerlo, no lo quiero conocer, no tengo porque hacerlo.. no lo quiero dentro de mi casa- se escuchó un suspiro- Hijo.. solo vuelve ¿Si? No quiero ni pensar en como pasaste estos días, quizás ni comías bien o dormías incomodo.. no te llevaré a ninguna cena pero.. regresa a tu casa, perteneces aquí conmigo- terminó con una voz más suave.
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Don't fight the feelings (AU)
RastgelePete es hijo de un adinerado empresario, con una familia bien posicionada generación tras generación. Tiene una vida de llena de facilidades, comodidades y privilegios, incluyendo cosas materiales de todo tipo, con un par de amistades sinceras que h...