Empujé suavemente a Yujis y me solté de sus brazos.
-"Realmente no viniste aquí sólo porque yo estaba aquí, ¿verdad?"
-"Ese fue el factor decisivo".
Yujis me entregó un trozo de papel enrollado y atado con una cinta para evitar que se deshaga.
-"¿Qué es esto?"
-"Léelo".
No parecía querer decirme nada hasta que lo vi por mí mismo.
Así que, obedientemente, tiré del cordón de la cinta y desdoblé el papel seco.
-"Este… Es un documento que revisa el contenido de la ley imperial, ¿verdad?"
-"bueno. Cambié algunas cosas".
Los cambios estuvieron relacionados principalmente con los deberes de la futura emperatriz.
-“Ajusté todo a tu favor. ¿Cómo es? ¿Hay algo más que deba cambiar?"
¡Ring!
[La constelación 'All in to Yujis' donó 1.000.000 de moneda
[Eugees, bastardo, ¿viniste a verme en la mañana para proponerme matrimonio?]
Ni siquiera pude mostrar mis sentimientos de vergüenza y simplemente jugueteé con los documentos.
-"¿Sabes lo ocupado que ha estado Jim para entregarte este documento y proponerte matrimonio?"
Yujis apretó la mano que sostenía el documento como si fuera plenamente consciente de mi condición.
-“Solo queremos comprometernos. De esta manera podemos evitar que engañen a personas que ni siquiera conocen su origen".
Parecía que lo decía pensando en alguien.
-"Te lo dije antes, no tengo intención de conocer a nadie".
-"¿Segura? ¿Y con el marqués Valenciano?"
Su voz fue particularmente aguda cuando mencionó a Ozworld.
¿Has oído el rumor que corre en Valhalla de que la relación entre Ozworld y yo es inusual?
-"Para nada. No tengo ninguna relación con esa persona".
Lo negué rotundamente, pero Yujis giró la cabeza con una expresión de total incredulidad.
-“¿Pero por qué ese hombre vino a buscarte?”
-"¿Sí?"
Comprobé con curiosidad la dirección en la que Yujis miraba y luego gemí suavemente.
No sé cuándo apareció, pero Ozworld estaba parado cerca de las escaleras que conducían al primer piso, mirándonos.
¡Ring!
[La constelación "Adicción a la dopamina" donó 1.000.000 de monedas]
[La dopamina volvió a golpear por la mañana]
Ozworld sonrió y saludo cortésmente.
-"Ozworld de la Casa Valenciano se encuentra con Su Majestad el Gran Emperador".
No había fallas particulares en la etiqueta, pero su actitud era tan relajada que resultaba molesta.
Estaba a punto de preguntarle por qué estabas aquí, pero me detuve.
Porque no pensé que habría una buena respuesta.