[Cinco]Casi una hora después de mirar el atardecer nos habíamos puesto a charlar de cosas banales, así confirmé más que esta chica tenía unas ocurrencias extrañas.
Una pregunta para ponerla a prueba se me ocurrió.
—Un deseo que siempre has tenido —esa pregunta puede decirte el tipo de persona que es.
Si dice la misma respuesta que todo el mundo, sabré que es alguien más manipulado por la sociedad.
—¿Un deseo? —se puso pensativa por un momento—. Vaya, no lo sé. Nunca me puse a pensar en eso, mi mayor deseo siempre ha sido ser libre.
—Piensa en algo que desearías si fueras libre.
Pasaron unos segundos que se quedó mirando a la nada, cuando una linda sonrisa se dibujó en su cara supuse que ya lo sabía.
—Ya sé.
Asentí dándole a entender que prosiguiera.
—Desearía ir a un campo de tulipanes blancos...
Mi gesto de confusión debió ser muy notable porque ella soltó una leve risita.
De tantas cosas que alguien puede desear ¿En serio eso quería?
¿Ni siquiera un poco de dinero era una opción?
—No pongas esa cara —me dio un golpecito en el hombro—. Es cliché pero me gustaría.
—Puedes desear tantas cosas como dinero, autos o mansiones o que sé yo... Eres muy extraña.
—Entonces desearía tener dinero suficiente para comprar un terreno para tener mi propio campo de tulipanes —sonrió triunfal.
⟨Buena jugada⟩
—¿Y por qué un campo de tulipanes?
—Es que... —suspiró profundamente—Cuando era niña mi familia y yo solíamos ir a un hermoso campo de tulipanes. Y desde entonces siempre he querido volver a ver uno así sea una última vez.
—¿Y qué quieres hacer ahí? ¿Cantarles a las flores o qué?
⟨Aunque es algo que la vería capaz de hacer⟩
—No niego que se me ocurriría esa idea —se rió dulcemente—. Pero lo que quiero hacer ahí sería ver un hermoso atardecer.
—¿Solo irás a ver un atardecer? —pregunté en un tono de disgusto.
—Oye, no me juzgues. Además a ti te gustan los atardeceres.
—Pero para eso no necesito un campo de flores.
—¿Sabes qué? Olvídalo, contigo no tiene caso —hizo un ademán con la mano quitándole importancia y apartando la mirada de mí.
Pasó un rato en silencio, un silencio muy cómodo debo decir, pero no podía no decirle lo siguiente:
—Te llevaré.
—¿Qué?
—Un día te llevaré a un campo de tulipanes blancos para ver el atardecer... Lo prometo...
—¿En serio? ¿Lo prometes de verdad?
Me giré dirigiéndole la mirada, ella me miraba sorprendida.
—Lo prometo.
Sonrió agradecida para luego acercarse a darme un fuerte abrazo, no supe responder y me quedé congelado en mi lugar. Ella lo notó al instante separándose apenada.
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𝐌𝐢 𝐌𝐮𝐧̃𝐞𝐜𝐚 // 𝐅𝐢𝐯𝐞 𝐇𝐚𝐫𝐠𝐫𝐞𝐞𝐯𝐞𝐬 ✔
FanfictionCinco Hargreeves, el asesino más peligroso del continuo espacio-tiempo siempre ha tenido una meta. Detener el apocalipsis. Y finalmente después de todos los sucesos que tuvo que pasar junto a su familia, cumple esa meta por la que tanto había trabaj...