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[Rayita]

Estaba viendo a Five dormir plácidamente, su respiración calmada era realmente relajante de ver.

Sé que suena raro, pero no tengo nada que hacer más que verlo dormir.

Últimamente me ha dejado "dormir" con él, cada quien separado obviamente, pero no es que sea gran cosa porque su cama no es precisamente muy grande.

Al asegurarme de que estuviera totalmente dormido y nada pudiera despertarlo, me levanté cuidadosamente de la cama.

Hice lo posible por no hacer ruido al caminar, me puse frente al espejo y me aseguré por el reflejo que no hubiera despertado.

Al confirmarlo me volví a centrar en mí.

Descubrí un poco mi hombro de la pijama, no se veía nada inusual, pero sí se sentía.

Intenté mover mi hombro pero nada pasó, era como si tuviera algo que me detenía de moverlo. Parecía que estaba atascado.

Después de algunos intentos fallidos, yo misma agarré mi hombro y traté de moverlo, así fue que pude desatorarlo.

Me asusté tanto que volví a taparme, inhalé hondo para no ponerme nerviosa o asustada.

Si era lo que estaba pensando, ahora no solo serían desmayos o mareos... Mis articulaciones iban por mal camino también.

Volví a mirar a Five por sobre mi hombro, él seguía perdido en sus sueños.

—Lo siento...

Me acerqué lentamente a él, me agaché a su lado y lo admiré por unos segundos.

—Ya no sé qué hacer... Si no puedo hacerlo, de verdad lo siento...

Intenté tomar su mano para darle una caricia en el dorso de esta pero me arrepentí, lo mejor era no arriesgarse.

Con sigilo volví a mi lugar de la cama y volví a recostarme mirando al techo.

Suspiré pesadamente y luego cerré mis ojos.

⟨Arreglaré esto como sea...⟩















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[Cinco]

Llegué con tranquilidad a la academia después del trabajo, hoy había sido un buen día.

Encontré a mi familia en la sala reunidos charlando.

—¡Cinquito! ¡Ven, hermano! —me dijo Klaus alzando los brazos.

No me negué, hoy estaba de buen humor, lo suficiente como para querer compartir mi tiempo con ellos.

Pasé tan solo unos cinco minutos allí sentado oyendo sus conversaciones y las raras anécdotas de Klaus, pero por alguna razón me sentía extraño.

𝐌𝐢 𝐌𝐮𝐧̃𝐞𝐜𝐚 // 𝐅𝐢𝐯𝐞 𝐇𝐚𝐫𝐠𝐫𝐞𝐞𝐯𝐞𝐬 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora