Emma
Escuché el conflicto de ayer, pero está vez mi espíritu chismoso no pudo con los primeros gritos.
Salí al jardín y regrese cuando lo supuse conveniente. Paul estaba frente a la ventana. Gracias a Dios estaba fuera de su alcance y no pudo verme.
—Ahora si cuéntame —llega Clara con cereal.
Decide venir con ella, no es que tenga opciones. Pero necesito una charla que solo ella puede darme. Sabe escuchar, no me juzga y me da buenos consejos. La perspectiva de otros es buena si se trata de la opinión de alguien de la que puedes estar seguro busca solo tu bienestar, yo estoy segura que Clara, lo busca.
—Me gusta Paul Beckham, y al parecer yo a él. Pero el señor Beckham su padre, me aclaro que yo solo era una puta para él. Que jugaría conmigo y luego me desecharía.
Suelto sin darle una oportunidad de asimilarlo.
—¿Eso dijo? —abre los ojos impresionada.
—Eso fue lo que entendí.
Se mete un bocado a la boca, mientras analiza que decir. Hago lo mismo valorando el delicioso sabor a cereal en mi boca.
—¿Enserio crees que él te rebaja de esa forma?
Bueno siendo sinceros, no lo ha demostrado. O yo no lo he querido ver. Y ese es el problema mi inseguridad me hace dudar. Puedo estar imaginando cosas que nada que ver, Paul, es un ególatra y prepotente nato, soy su contrario en alguna cosas. No puedo saber los que realmente siente por mí.
—No pero...
—No te dejes llevar por lo que otros digan, ¿Por qué no le preguntas a él de una vez?
Bajo la mirada con pena del porque no lo hago.
—Porque tengo miedo de su respuesta.
—Pero si dices que él te confesó que le gustabas.
—Lo hizo.
—Y a ti también te gusta —asegura.
—Sí.
—¿Y entonces?
—Me da miedo.
—Castaña tú dices que no hay que generalizar el comportamiento de un hombre.
—Y si me enamoro, y luego lo hace.
Sigo con miedo, no quiero pensar lo que llegaría a ocasionar si vuelvo a pasar por lo mismo.
—Habra valido la pena.
Talvez, Paul no es igual a todos, no se acostara con otra, ni me dejará por otra. No me abandonará cuando dicen amarme. Ni se propasara conmigo. Tengo que tener la seguridad de que no me fallará.
—Es distinto, pero mi inseguridad no me deja.
—Sabes que ahora que llegues tienes que preguntar —deja el cereal en la mesa—. Aclaremos esto, te gustó tú me gustas, ¿que más quieres? ¿Que te folle?
Le reprochó con la mirada. Con Paul, quiero todo, no estaría mal perder mi virginidad con él, más bien sería increible.
—Bueno, así no, pero tienes que hablar el tema. O simplemente bésalo y si corresponde es porque siente lo mismo.
Pienso con mi cereal en mano, besarlo. Be-sar-lo. Boca a boca, labios contra labios. Su lengua en mi boca, la mía en la suya. Probar su boca, esos labios carnosos.
Me parece muy bien.
Sería muy atrevido de mi parte, pero así soy yo. Lucho por lo que quiero y Emma Johnson jamás es derrotada.
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¿Amar Vale La Pena?
RomanceLa vida de Paul, cambio drásticamente después de su lamentable accidente, que para su infortunio lo dejo en una silla de ruedas. No le ve más ningún sentido a la vida. Emma, que a pesar de sus conflictos y problemas personales no da marcha atrás. Ll...