Earned It » Jos Canela

Capítulo Nueve

9.- prueba de embarazo

La mirada se me hacía cada vez más borrosa, por las ganas de llorar. Tenía miedo de todo, todo lo que podría pasar las próximas horas siguientes.

— Si estuviera embarazada te alejarías ¿no es así? Lo harías.

—Ya te dije que no tengo idea Sofía—talló su nariz y suspiró—. Sube al auto. Sabremos de una vez por todas si estas o no.

Subí al auto de Jos, coloqué el cinturón de seguridad. No sabía a dónde me llevaba pero por las palabras que acababa de decir era claro que me llevaría alguna clínica o algo parecido.

Jos conducía tenso, su rostro reflejaba enojo, frustración entre otras cosas que preferiría no saber. Mis piernas temblaban al igual que mis manos y la desesperación cada vez aumentaba.

No entendía como se le olvido poner el preservativo y no entendía como yo no pude notarlo.

Al fin Jos aparcó el auto frente a una clínica, apagó el auto y salió esperando a que yo hiciera lo mismo. Me aferre a mi misma y entré a aquella clínica junto a Jos.

Había varias embarazadas esperando su cita, estaban sentadas y cada una de ellas estaba angustiada.

—Espera aquí. —Jos dijo, me senté en las sillas de espera mientras que él se acercó a una enfermera.

Se veía que la enfermera le negaba algo, Jos bufaba cuando ella hacía la misma acción. La enfermera se marchó y Jos regresó a mí.

—Vámonos, esto es una mierda.

— ¿Qué ha pasado? ¿Qué te dijeron? —al llegar al auto pregunté.

—No... —suspiró— necesita estar alguien de tu familia. Si no es así, no puedes abortar.

—Jos pero ni siquiera sabemos si en verdad estoy embarazada—negué con la cabeza —. Hay una farmacia cerca de aquí, hay que ir por una prueba de embarazo y así arreglamos las sospechas.

Jos asintió, encendió el motor del auto y condujo hasta la farmacia.
Ya estando ahí, ambos bajamos del auto y caminamos hasta la señorita que supongo es la que atiende.

— ¿Qué se te ofrece? —dijo amablemente dejando de buscar lo que estaba buscando en los gabinetes.

—Uhm...una prueba de embarazo. —susurre. La señorita me inspecciono durante unos segundos para luego girarse y caminar al fondo.

—Toma, hay un baño al final del pasillo

Caminé hasta ahí, me senté en el retrete y seguí cada una de las instrucciones que viene en el empaque.

Al haber acabado salí de nuevo caminando hacía la salida. La muchacha me sonrió y le devolví con un gracias. Subí al auto de Jos, quien se encuentra con los ojos cerrados y recargado en su asiento.

— ¿Y bien?

—Tengo que esperar algunos minutos, para poder darme un resultado. —él asintió mirando la prueba que sostenía entre mis manos.

Jos al ver como no hago expresión alguna, me rebata la prueba y lo mira.

— ¿Qué se supone que signifique esto? —quiso saber.

—Una rayita es negativo y dos rayitas es positivo. Y... ¿Cuál es el resultado?

—¿Negativo?—le miré y en su rostro había una sonrisa formándose.

—Bien, ahora llévame a mi auto. —dije y me miró.

— ¿Qué?

—Lo que oíste Jos, quiero ir a casa.

—Sofía...—colocó una mano en mi pierna, pero rápidamente la quite provocando una mueca de enojo en Jos—. Como digas.

-o-

Al volver al centro comercial, Jos estaciona el auto cinco lugares antes que el de mamá. Bajé del auto de Jos y salí de ahí, escuchando la puerta de Jos abrirse y sus pasos apresurándose a los míos.

—No te despediste.

—Lo sé.

— ¡Vamos! Gatita solo un beso. —cogió de mi brazo y me giró a él.

— ¡Tengo un jodido nombre! No por nada mi madre pensó en el.

—No entiendo cómo has cambiado de parecer.

—Jos...—suspire y negué con la cabeza—. Me tengo que ir.

— ¡Hey! espera —volvió a sostenerme del brazo provocando que girará y chocase con su pecho—. ¿Sabes qué no dejaré de llamarte así solo porque tú me lo pides?

— Esto es absurdo— y las lágrimas salieron, después de aguantar las ganas de llorar.

—Oh vamos, Sofía ¿ahora por qué lloras? ¿En serio te molesta tanto que te diga de esa manera? —sonrió.

—En verdad eres un asco de persona—me arrebató de su agarre queriendo golpearlo en la cara pero fracase pues él sostuvo mi mano —. Hijo de puta.

—Ambos sabemos que la que está mal aquí eres tú, cuida tus palabras princesa.

—Jos...—retrocedí un paso—. No quiero que te me vuelvas a acercar. —le miré a los ojos y salí corriendo hasta el auto de mi madre.

Lloré mientras manejaba, estaba enojada con Jos, por la simple razón de que casi quedo embarazada por su culpa, en parte mía también.

Maneje a una velocidad alta, pasando los límites. La vista se me es borrosa por las lágrimas.

Al ya llegar a casa aparque el auto. Entré a casa corriendo, dejé las llaves del auto en la mesa de la entrada y subí hasta mi habitación.

Agradecí de que Dav no se encuentre, me tumbe en la cama y seguí llorando; mojando parte de la sabana.

Lo único que ahora pasa por mi mente es si fue verdad que quiero a Jos fuera de mi vida, si es que hubiera quedado embarazada que hubiera sido de mi. No quiero tener un bebe a mi corta edad. Qué hubiera pensado mamá o mi hermano de mí.

No sé si Jos se hubiera hecho responsable del bebé pero y si no es así todo empeoraría. Sinceramente Dav me ayudaría y me brindaría todo su apoyo, al igual que Chloe, Chloe estuviera feliz por ello, pero a la vez me llamaría "tonta" por no haberme cuidado.

Pienso en hacerme una segunda prueba de embarazo, a veces no son realmente confiables y eso me atemoriza bastante. Así que no perderé nada al volverme hacer la prueba.

Pero por el momento lo mejor sería alejarme de Jos un tiempo o quizás para siempre.

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Hola :) como ven ganó el maratón :v y aquí está el primer capítulo del día. Espero y les allá gustado.
No olviden votar y comentar si les gusto.
*NO SEAN LECTORAS FANTASMAS*
Y pásense a leer "Four Walls" de Alonso Villalpando Uhr Uhr...

Las amo mucho ♥

Att: Bethxx