Earned It » Jos Canela

Capítulo Veintiocho

[Maraton 4/6]

28.- Ni te atrevas

Las personas empezaban a llegar cada vez más, algunos se quedaban en la planta principal, otros subían al segundo piso y algunos al ver que adentro de la casa habían muchos adolescentes preferirían quedarse afuera.

Bryan llegó con cuatro tragos y nos lo entrego a todos, dejé mi vaso sobre una mesa. No quería beber, no por el momento.

Las nueve de la noche se hizo presente y en este pequeño rato que llevábamos en la casa de Nico, no habíamos visto a Dav ni a sus amigos y menos a Nico.

—No estoy del todo segura si quiero estar aquí Jos—dije y él se giró a mí.

—Claro que quieres—acarició mi pierna y besó mi cuello, quedándose unos segundos ahí—. Hueles tan bien.

—¿Es necesario que hagan eso cada vez que estoy presente?—Isaac cuestionó y Bryan carcajeo.

—Sí—Jos asintió—. Oye, yo no tengo la culpa de que Sofía sea tan caliente.

—Yo no hubiera dicho eso Jos y menos cuando su grande hermano les está observando-—Bryan dejo de reír y tosió para luego beber de su cerveza.

Miré alrededor hasta toparme con los ojos de Dav, este lucía ahora con una chaqueta deportiva color negra al igual que sus jeans. Me sonrió negando con la cabeza, después miró a otro lado bebiendo la cerveza que llevaba en su mano.

La música empezó a sonar por toda la casa, algunos empezaron a bailar ya sea adentro o afuera, Bryan se puso de pie acercándose a una chica, le susurró algunas cuantas cosas y luego ambos comenzaron a bailar alejándose cada vez más de nosotros.

Cogí el vaso el cual Bryan me había traído, no tenía la más mínima idea de lo que este contenía pero aún así lo bebí.

—Tranquila princesa —Jos susurro en mi oído al darse cuenta de la rapidez que tomé aquel líquido. Me tomó de la mano y caminamos hasta el centro de la pista, en donde Summertime Sadnes de Lana del Rey comenzaba a sonar.

Colocó mis manos sobre su cuello y me acerco a él, tomándome de la cintura. Me miró a los ojos y me sonrió de una manera que lo poco alterada que estaba se esfumo por completo, moví un poco mis caderas al sazón de la canción, Jos sonrió y escondió su cabeza en mi cuello, en donde beso y succiono parte de mi piel, tiré mi cabeza hacía atrás y cerré los ojos dejándome llevar.

Revolví su cabello con mis manos alterándolo un poco, roce mi pierna con su entre pierna y gimió, nuestros labios se juntaron, mordió mi labio inferior tomando con sus manos mis mejillas para luego pegarme a su pecho y susurrar:

—Eres tan caliente—la canción terminó , algunos se quedaron en la pista para quedarse a bailar Burn It Down de Linkin Park . Jos y yo caminamos hasta la barra de bebidas en donde pedimos dos tragos. Nos sentamos en las bancas mientras veíamos como la gente bailaba.

—Después podemos ir a una de las habitaciones ¿no crees?—Jos sugirió y yo reí por lo bajo—. Estoy hablando en serio gatita, necesitamos divertirnos un poco más.

—Ni te atrevas—la voz de Dav se escuchó acercándose a nosotros. Ambos nos giramos y mi hermano se encontraba al otro lado de la barra junto con sus amigos y junto a Nico—. ¿Quieres diversión? Yo te la puedo dar.

—Tu hermana ya me dio lo suficiente—Jos dijo y Drake y Ed se rieron.

—Se divirtieron en la pista de baile ¿no es así?—Dav volvió hablar y Jos asintió orgullosamente dándole un trago a su vaso de bebida.

Jos me tomó del brazo alejándome de ellos, volvimos a donde estaba Isaac, el cual ese chico ya estaba casi cayéndose de lo ebrio que estaba.

—¡Los extrañe!—gritó atrayendo la atención de algunas personas de alrededor—. Les traje bebi..das—dijo en un tono chistoso a causa de lo borracho que estaba.

Jos se tumbo en el sillón abriendo la cerveza para luego beberla, me senté en medio de Isaac y de Jos.

—Tu hermano aún me castra hasta el coño—dijo y golpeó su pierna con su mano.

—Aún no entiende que yo...

—No entiende muchas cosas porque no las quiere entender— Jos bebió el último sorgo de su bebida para luego dirigirse a mis labios y besarlos.

—David no tiene el control de mi y esta noche se lo demostrare— dije mientras podía, pues los labios de Jos contra los míos provocaban que no hablará tan bien.