Capitulo Veinte

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20.- Sólo tienes diecisiete

— ¿Acaso se te ha zafado un tornillo David?—le miré y pestañee unas cuantas veces—. No lo haré, no sólo porque tú me lo pidas.

— Solo hazlo Sofía, juró que si lo haces te dejo en paz.

Miré mi móvil y enseguida a Dav, quería que me dejara en armonía de una vez por todas. Sólo quería que me dejará vivir mi vida a mi manera y al lado de Jos. No quería que Dav se entrometiera en todo lo que haga y dijera que está mal.

Bufe y marqué su número. Jos contesto.

— ¿Cómo estas?—dije y él suspiró desde la otra línea

— ¿Cómo quieres que este? Princesa me duele todo el cuerpo—gimió de dolor, luego volvió a suspirar.

— ¿Jos?

— ¿Sí?

—Con lo de ser tu amiga con derechos es muy... ¿Por qué no podemos ser algo más? —dije y él rió.

—Oh vamos. Tu hermano está ahí ¿No es así? —miré a Dav, él solo tenía la mirada fija en su regazo. Mi silencio lo dijo todo y Jos volvió a carcajear—. ¡Hola!—Jos gritó desde la otra línea.

David pasó su mano por su rostro luego me rebató mi móvil finalizando la llamada y arrojando el celular a los asientos traseros.

—Dime que no es en serio, por favor dilo Sofía—colocó sus manos en su rostro cubriéndola por completo, le miré confundida y llevé un mechón de cabello detrás de mi oreja.

—¿Decir qué?—cuestione, pues honestamente no entendía nada de lo que estaba hablando—¿Qué tengo que decir?—volví a preguntar.

—Lo que acabo de escuchar—mascullo aún con sus manos pegadas en su rostro—. Pensé que tomarías un camino diferente a las otras, te imaginas lo que dirá nuestra madre al saber aquello de ti.

Le miré de nuevo, está vez frunciendo el ceño.

— ¿Qué tendrá que saber ella de mí?— dije y alzo la mirada.

—Amigos con derechos...— aparte mi vista de Dav, no quería que me mirase con desdén.

No medí mis palabras al hablar con Jos, nunca pensé que diría eso, en realidad no quería decir esas tres palabras estando con Dav. No sé como él se sienta en este momento, pero de acuerdo a su mirada no está nada contento. Ahora más que nada puede ser que odie aún más a Jos y esto no iba para nada bien, todo comenzaba a empeorar.

—David yo no...

— ¡Solo tienes diecisiete años! ¡Diecisiete¡—golpeó el volante luego llevó sus manos a su cabello en donde tiró de ellos—. Al decir que él era sólo tu amigo no me imaginaba esto...Sólo quiero que me contestes que has hecho con él.

— ¿Qué quieres decir con eso? —-cuestione aún sin mirarle.

—¡Qué me digas lo tanto que han hecho juntos como amigos!—tiró de su cabeza hacía atrás y bufo con pesadez—. ¿Te has metido con él?—quiso saber.

En este momento no sabía que decirle, no quería decirle un sí, pero tampoco un no; pues le estaría mintiendo aún más y no quería eso.

Tragué saliva y abrí mi boca en querer decir una palabra, pero me fue inútil así que la volví a cerrar. Y de nuevo el silencio dio una respuesta la cuál Dav no quería escuchar.

Golpeó el volante una vez más provocando que sonará el claxon, se recargo en él, y lo oí maldecir.

—¿Acaso te volviste loca? —dijo entre dientes.

— ¿Puedes llevarme al instituto? No quiero hablar de esto.

—¿Esto es lo que quieres? Concederle a ese cabron sus placeres sexuales ¿no es así?—levantó la mirada y prendió el motor del auto, volviendo de nuevo a la autopista—. ¿Desde cuándo lo conoces?—Preguntó.

—Desde que me fuí al apartamento con Chloe, lo conocí andando en el corredor.

—Hubiera preferido no haber regresado de ese intercambio —tosió —. Así nunca lo hubieras conocido.

—Sería lo mejor—susurre.

-o-

—Se ha saltado muchas clases señorita Sofía esta no es una escusa, no una más. Usted sabe que aquí en el instituto no toleramos eso. ¿Acaso quiere reprobar el semestre? ¿Qué ha pasado con sus calificaciones? —-preguntó el asesor del instituto.

Estoy platicando con el director advirtiéndome sobre mis faltas de algunas clases, le he dicho que lo siento miles de veces y que no fue mi culpa y mucho menos fue a propósito.

—Sus notas estaban magnificas y de un día para otro se vinieron para abajo. No entiendo eso, señorita.

Tampoco yo.

—Le juro que haré lo más que pueda para mejorarlas, pero en serio le digo que no fue mi intención llegar tarde. Y le prometo que no sucederá más.

Bufo y asintió

—Bien, sólo porque tus ultimas calificaciones me sorprendieron, pero tu primera clase comenzó a las...—miró su reloj que colgaba de su muñeca—...hace quince minutos, y no puedo interrumpir la clase y no quiero que tú lo hagas, así que esperaras hasta tu próxima clase—asentí, me di la vuelta y giré la perilla de la puerta para poder salir.

Caminé hasta las gradas en donde se suponía que Isaac y Nico se encontrarían practicando en las canchas.

Me impresione como no había tantos chicos sentados en las gradas. Me imagino que el director ya les advirtió sobre echarlos del instituto. Nadie quiere ser expulsado a finales del año.

—¡Hey Sofía!—percibí la voz de Nico, giré mi cabeza solo un poco, lo necesario para ver como él subía por las gradas—. Otra vez de nuevo o ¿me equivoco? —llegar tarde a clases parecía ya costumbre, y Nico ya sabía eso; y de mi rutina en caso de llagar tarde a mis asignaturas.

—Así es, tarde de nuevo. ¿Y qué hay con Isaac? —quise saber.

—Faltó, él se ha quedado en el hospital junto con Bryan, el chico esta devastado—quise decir algo pero Nico siguió hablando—. Esa era la carrera que tanto ha deseado, su carrera. No entiendo como en tan solo unos segundos le destruyeron su ilusión.

Y de nuevo me hicieron sentir mal a lo que Dav hizo.

—Yo lo siento en verdad—fue lo único que salió de mi boca.

Entiendo perfectamente como se ha de sentir Bryan con todo esto. Y lo peor es que siento que es mi culpa todo lo que está sucediendo.

—No, no tienes porqué —tomó de mi mano, haciéndola puño con la suya y sonrió.

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GRACIAS A LOS NUEVOS LECTORES Y A LOS QUE ESTAN DESDE QUE SUBI EL PRIMER CAPITULO: 3

SON LAS MEJORES.....!!!!! A TODAS USTEDES LES DEBO UN JOS EN SU CAMA ( ͡° ͜ʖ ͡°)

Att: Bethxx

Earned It » Jos Canela Donde viven las historias. Descúbrelo ahora