Mi Secreto. (Jinx- JaekyungxKimDan)

Capítulo Siete.

La semana terminó y tres grandes noticias se revelaron. Una buena, otra mala y la otra no sé cómo etiquetarla.

—Realmente funcionó, no puedo creerlo.— Namwook sonríe casi conmovido. Yosep a su lado palmea su espalda con calma.
—Mi esposa tenía razón.

Oh, así que fue idea de su esposa.

—El gimnasio estuvo tranquilo y todos conservan su cuerpo ileso.

—Me alegro que haya funcionado, fue difícil mantener alejado a Jaekyung.— sonrío emocionado y ambos se me quedan viendo.
—¿Qué ocurre?

Namwook señala algo detrás mío y mi cuerpo se tensa al percibir el aroma del Alfa que he estado evitando. Aunque él también lo ha hecho.
Ha mantenido su distancia y no hemos tenido sexo, ni ningún encuentro parecido.

—¿De qué están hablando? ¿Qué funcionó?— Jaekyung entra a la oficina y cierra la puerta de forma lenta.

—Oh, no es nada.— Namwook mueve la mano, restando importancia. La mirada del Alfa se posa en mí y levanto los hombros.
—¿Qué necesitas?

—Tú deberías saberlo, eres mi representante.— se sienta a mi lado y mira a los otros dos como si quisiera golpearlos.

Tanto Namwook como Yosep se quedan en silencio y Jaekyung les tira su celular.
¿Salió un nuevo artículo sobre él?

—El imbécil de Chan-Yeol canceló la pelea de mañana porque presenta su rut.— suelta una carcajada y aprieta su puño hasta lograr que las venas sobresalgan más.
—¿En un mes cuántos ruts se pueden tener?

—Su representante no informó nada, quizás es una noticia falsa.

—¿Cómo sabes que está mintiendo?

—El muy idiota me imita en todo, cuando llegó mi rut, él también publicó una noticia sobre el suyo...

—Espera, ¿tu rut coincidió con la enfermedad del doc?— Namwook lo mira y después a mí.
—¿Ustedes están...? ¿Están juntos?

—Namwook, ¿eres tonto o te haces?

Bajo la cabeza y retengo las lágrimas. No lo entiendo, no tengo porque sentirme triste.

—Por supuesto que sí, ¿por qué más lo dejaría vivir en mi casa?— su tono es calmado, nada comparado a mi corazón y a las caras de ambos entrenadores.

El silencio se hace presente, ninguno está dispuesto a decir algo para romperlo. Lo dicho por el Alfa es algo difícil de digerir.

—¿Eres su Alfa entonces?— Yosep tose un poco y acomoda su postura.
—Tendremos que desistir del plan, Namwook.

—¿Qué plan?— Jaekyung parece ya haber perdido la paciencia. Se levanta y me arrastra con él.
—Ya que ustedes no hablan claro, me lo llevaré para interrogarlo.

—¡Espera! Tú te quedas aquí, vamos a charlar un poco.— el entrenador golpea el escritorio con su dedo y mira al Alfa fijamente.

Me echan de la oficina y desde afuera se pueden oír los gritos del entrenador.
Daehyun y Yoon-gu se me acercan y pregunta que sucede, sólo puedo levantar mis hombros. Más allá de la confesión por parte de Jaekyung, no entiendo porqué lo están regañando.

—¿Te enteraste que la pelea fue cancelada hasta que Chan-Yeol este disponible?— Yoon-gu me mira con ojos grandes.

No conozco a ese hombre, nunca lo escuché nombrar.

—El señor Joo lo dijo hace un momento. ¿Ese peleador es conocido?— mi pregunta parece activar algo, ya que ambos me agarran y me llevan a una de las bancas. Me hacen sentar mientras Yoon-gu se sienta a mi lado y Daehyun lo hace en el piso al frente nuestro.