Capítulo Treinta y Cuatro.

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—¡Jaekyung!— muevo su cuerpo de forma brusca para que reaccione.

A mitad de la noche escuché que se levantó de la cama y vino conmigo, se acostó a mi lado y a los minutos comenzó a moverse inquieto. Estoy tratando de despertarlo, pero no puedo.

—Vamos, despierta.— mis manos tiemblan y su angustia parece afectarme también. Las esquinas de sus ojos están húmedas y está cubierto en sudor.

Continuo llamándolo hasta que abre los ojos y se sienta de golpe. Observa la habitación y luego me mira fijamente, analiza todo mi cuerpo y se centra en mi vientre.

—Fue un maldito sueño.— sonríe con locura y pasa una mano por su rostro.
—Un maldito sueño, vaya mierda...

Murmura otras palabras, lo miro con duda y alejo la mano que descansa sobre su regazo.
¿Qué habrá soñado? Debe haber sido algo muy malo, su estado es inestable y las lágrimas siguen acumuladas en sus ojos.

—Kim Dan.— me llama casi en un susurro. No me mira, su mano sigue cubriendo su rostro.
—¿Firmaste un papel para que salven al bebé en lugar de a ti?

Abro los ojos con sorpresa ante esa pregunta. Él aleja la mano y se mueve para quedar más cerca. La mirada que siempre estaba vacía, ahora está llena de tristeza y perdida.

—¿Se encuentra bien? ¿Qué tipo de sueño tuvo?— también me acerco y apoyo la palma de la mano sobre su mejilla.
—No tengo a nadie a quien designar como mi tutor y el doctor Park me dijo que esa era una opción. Todavía no firmo nada, estaba esperando...

Estaba esperando a que Jaekyung me dijera algo al respecto.

—Un Omega recesivo no tiene derechos y el doctor Park quería que al menos pudiera decidir sobre esto. No es algo que se decide de un segundo a otro, tengo mucho que pensar.— bajo la mirada y retiro la mano.
—Si muero y mi bebé queda solo, ¿quién cuidará de él?

—Kim Dan.— su tono sigue siendo bajo.
—¿Me dejas marcarte?

Levanto la cabeza de golpe y me topo con su mirada aún perdida. Hay algo extraño, parece que todavía sigue en la bruma del sueño.

—Lo mejor es volver a dormir, después podemos seguir hablando de este tema...

—Respóndeme.— agarra mi mano con fuerza y tira de ella hasta sentarme en su regazo. Su boca se dirige a mi nuca y agarra el collar entre los dientes.

—Señor...— trato de voltear, pero sus brazos me rodean con firmeza.
—En la mañana hablaremos con más calma, usted tuvo un mal sueño y sigue con ese sentimiento.

—¿No quieres?— me ignora y continúa insistiendo.

—Es usted quien no quiere, me dijo que no está en sus planes tenerme como compañero.— trago en nudo en mi garganta y agarra sus manos.
—Yo... Yo no quiero que lo haga por responsabilidad.

—Una semana.— susurra contra mi piel. Debo mover un poco mi cabeza para escucharlo mejor.
—Dame una semana y luego decides si quieres o no la marca.

—¿Por qué está haciendo esto?

—Tengo una respuesta para ti.— pasa de mi pregunta, su abrazo se aprieta más y me remuevo con dolor. Una de sus manos esta cerca de mi vientre y el bebé parece sentirlo, ya que comienza a moverse y también me provoca dolor.
—No tendré sexo con nadie.

Dejo de moverme al instante y abro aún más grande mis ojos. Espero a que siga hablando, pero parece que sólo dirá eso mientras se centra en morder el collar.

Mi corazón se acelera y una sensación de tranquilidad se extiende por mi cuerpo. Dejo que me abrace todo lo que quiera y ni trato de moverme. Mi bebé también se tranquiliza y sus movimientos se vuelven más suaves.
Jaekyung mueve la mano y la posa por completo sobre mi vientre. Entrecierro los ojos, sintiéndome complacido ante sus acciones.

—Tus feromonas se están descontrolando.— gruñe con satisfacción y sus feromonas también salen cubriendo las mías rápidamente.

—Se está comportando extraño.— susurro. No me importa que sea así, mientras no cambie por la mañana.
—¿Su lado Alfa está tomando el control?

—No.— su tono se vuelve seco de golpe.
—¿Lo prefieres a él?

—A mi me gusta todo de usted.— cierro los ojos y me apoyo más contra su cuerpo.
—Si llega el momento de decidir y yo no he firmado el papel, usted es mi responsable. Es el padre del bebé y ellos harán lo que usted elija.

—Tu doctor Park te prefiere a ti, hará lo que tú digas.— su mano se mueve con calma y el malestar en mi vientre bajo se desvanece un poco.

El ambiente entre ambos se torna relajado. Jaekyung agarra la manta y la pone encima de mis piernas.

—Su hombro...— digo mientras sostengo su muñeca, la mano que acariciaba mi vientre fue bajando hasta quedar sobre mi miembro.
—Namwook está muy preocupado y yo también.

—Mi hombro está bien.— continúa tocando esa zona y me remuevo al sentir una descarga de placer.
Hace mucho no tenemos un contacto tan íntimo.
—Relájate, no te la voy a meter.

Baja mi pantalón junto a la ropa interior y su mano agarra mi miembro, comienza a moverla y aprieto las piernas al sentir el hormigueo y las ansias de más. El lubricante se desliza por mi entrada y moja mi ropa.

—Más... Más despacio... Uhg

Su pene endurecido presiona mi cadera y llevo mi mano hasta allí. Sin embargo, Jaekyung se mueve y me deja acostado mientras él se posiciona encima.
Termina por quitarme la ropa y me cubro con manta. La habitación está iluminada por completo, ya que encendí las luces para despertarlo.

—No creo que sea buena idea...— me aferro a la manta cuando él quiere quitarla.
—¿Puede apagar las luces?

—¿Por qué? Ya quítate eso.— tira más fuerte hasta lograr sacarla.
—Ya te he visto por completo, ¿por qué estás tan tímido?

—Es que...— cruzo las manos por mi pecho y esquivo su mirada.
—Mi vientre está más grande y no es nada atractivo. Mi pecho también está creciendo...— continuo murmurando hasta sentir sus labios sobre los míos.

Su mano aprieta mi pecho y juega con uno de mis pezones con insistencia. Es doloroso, pero se siente bien, más cuando su boca reemplaza la mano. Mordisquea y chupa hasta sentirse satisfecho, luego baja por mi vientre y deja algunos besos.
Sus labios se mueven diciendo algo y me apoyo en mis codos para verlo.

—Oye, Kim Dan, ¿qué prefieres?

—No...— susurro al notar sus intenciones. Su lengua está cerca de mi miembro mientras una de sus manos se dirige a mi entrada.

—¿No? Bueno.— se aleja con una sonrisa divertida y agarra mis piernas.
—¿Qué? No me mires así, tú dijiste que no.

Cierro los ojos y dejo salir un largo suspiro. Su mano agarra me mentón y cuando abro los ojos me sobresalto al tenerlo tan cerca. La sonrisa desapareció y en su lugar sólo hay un gesto inexpresivo.

—No cierres los ojos, mantenlos abiertos.— desliza su pene por medio de mis muslos y mueve su cadera de forma lenta. Entrecierro los ojos y gimo con gusto por la sensación placentera.

—Ahh...— abro la boca ante la repentina brusquedad en sus movimientos y él aprovecha para meter su lengua.
—Mmm-Espere... ¡Ahh!— mis uñas se clavan en su piel y termino por correrme junto con él.

—Kim Dan.— agarra mi mentón nuevamente y aprieta mis mejillas mientras ríe.
—No dormirás esta noche.

Mi Secreto. (Jinx- JaekyungxKimDan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora