¿Esto... es amor? [Suegiku y Kenjikyou]

Capítulo XVII

-TETCHO-

La hora de salida llegó, me encuentro saliendo de la escuela junto a Kenji y sus amigos. Mi hermano se encuentra tomado de la mano con Kyouka, aún siguen saliendo pero ya se lo dieron a conocer a Yumeno, el cual se emocionó.

Cuando llegamos completamente de la institución Kenji y yo nos despedimos, el esta vez ira a una pijamada en la casa de Kyouka, obviamente mis padres le dieron permiso. Visualizo cuando se van alejando, checando que todo estuviera bien. Me pongo a observar nuevamente el paisaje, no tengo prisa en llegar a mi casa pues ni mi madre ni mi padre se encuentran por su trabajo.

El clima es agradable, bueno, siempre lo ha sido, el viento sopla de vez en cuando y los colores del cielo se mezclan, es simplemente hermoso. A lo lejos logro ver a Jouno, se encuentra sentado en una jardinera de las afueras de la escuela. Me acerco a él para hacerle compañia.

—¿A qué vienes? —me pregunta un poco malhumorado.

—Quiero hacerte compañia —respondo, sentándome a su lado.

—¿Y cómo para que quieres hacerme compañia?

—Sólo quiero acompañarte. Además, no planeo irme en un buen rato, me quedo mucho tiempo observando el paisaje y- —me detengo un momento, apenas me doy cuenta de que no debía haber mencionado el paisaje, pues el no puede verlo —. Perdón, no cuide mis palabras, otra vez.

—No tienes que disculparte —dice después de soltar un suspiro —. Oye... ¿Me haces un favor?

—Claro, ¿cual?

—¿Me puedes... Describir el atardecer? —pide, noto un pequeño rubor en sus mejillas, pero no le doy importancia.

—Por supuesto —volteo de nuevo hacia el cielo para observarlo —. El cielo está despejado, los colores se mezclan, mayormente hay color naranja y amarillo, también el viento sopla suavemente, también se puede observar a algunos pájaros recorrer el cielo.

Parece quedarse procesando la información, dirige su rostro hacia arriba como si pudiera observar el cielo. Parece relajarse un momento, suelta un leve suspiro y vuelve a hablar.

—Suena lindo —menciona con una pequeña sonrisa, nunca lo había visto sonreír... Es lindo cuando lo hace.

—No suena, está lindo... Como tú —lo último lo digo sin pensar.

Noto como dirige su rostro hacia a mi, me doy cuenta de lo que dije y un pequeño sonrojo aparece en mis mejillas. Se que en algún momento me va a golpear por el comentario así que recupero mi postura y trato de hacer parecer un pequeño mal entendido lo último que dije, pero el se me adelanta primero.

—No te preocupes, no te voy a golpear —dice, parece que me leyó la mente —. No me molesta, sólo que no es tan normal que me lo digan.

—¿En serio no te lo dicen siempre? —él niega con la cabeza —. Pues la gente que se junta contigo no nota tu belleza —menciono colocando un mechón de su cabello atrás de su oreja, recibo un golpe por esto.

—¡No me digas eso, idiota!

—Pero es la verdad.

—No me gusta que me digan mucho esas cosas.

Suelto una pequeña risa inconscientemente, acarició un poco su cabello y lo alboroto, se ve lindo así. Estoy a punto de darle un beso en la mejilla pero su celular empieza a sonar.

Checa quien le marca y al verlo noto que se sobresalta un poco. Me dice que se tiene que ir de inmediato aunque suena un poco... Nervioso, ¿a qué se debe eso? ¿Será que tenga que ver con la llamada? Prefiero quedarme con la duda ya que lo veo perderse en el camino. Yo también aprovecho para irme a mi casa.

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Bueno, aquí otro capítulo. Creo que ya es un poco obvio quien le marcó a Jouno, ¿no?

Ya no tengo nada importante que decir, nos vemos en otro capítulo.