¿Esto... es amor? [Suegiku y Kenjikyou]

Capítulo LIX

-TETCHO-

Como normalmente, espero a Jouno afuera del salón, sólo que esta vez sale acompañado por un chico...

Es un chico albino, tiene un ojo tapado, pero el que se logra ver es de color gris. Logro reconocerlo de inmediato.

Se trata del gracioso de la clase: Nikolai Gogol.

¿Qué hace ese con mi novio? ¿Acaso no sabe que yo soy el único que puede estar con él? Bueno, tampoco tengo que ser celoso, ni tóxico, pero... siempre he desconfiado de ese chico.

Espero un poco, hasta que Nikolai rodea con el brazo a Jouno.

Okay, definitivamente, ya me puse celoso.

Me acerco a ellos, llego por detrás de Jouno, y rodeo su cintura con mis brazos, se paraliza un poco, yo sólo le doy un beso en la mejilla, y dirijo mi vista hacia el otro chico.

—¿Interrumpo algo? —pregunto con una sonrisa forzada.

—No. Para nada. Sólo que Jouno me iba a pasar unos apuntes, pues voy atrasado en algunas materias —responde, con su típica sonrisa de siempre —. Bueno, nos vemos mañana, Jouno —se despide y se va corriendo hacia un chico violáceo que pasaba por ahí.

Suelto a mi novio, y le doy otro beso, pero esta vez en la frente. Él se queda con una expresión seria, cruza sus brazos y alza la cabeza para quedar cerca de mí, pues es más pequeño que yo.

—¿Qué fue eso? —pregunta —. Parecía que estabas celoso.

—¿Acaso ya no puedo ir y abrazar a mi novio cada vez que quiera? —pongo una cara inocente, aunque no lo puede ver.

—Claro que puedes —menciona —. Pero tampoco tienes que estar aquí queriendo matar a quien se me acerque.

—Es que no confío mucho en él... —vuelvo a rodear su cintura con mis brazos, sólo que esta vez quedamos frente a frente —. ¿Ya te dije que eres hermoso?

—Sí, Tetcho. Me lo dices siempre.

—¡Oigan. Apurense. Los estamos esperando!

Escuchamos una voz conocida, volteamos y nos encontramos a Teruko y Tachihara, quienes llevan un largo rato esperándonos.

Nos dirigimos hacia ellos, pues parece que nuestra amiga ya no tiene paciencia para esperar. Quedamos en ir al cine hoy, Jouno no estaba muy de acuerdo con la idea, pero pude convencerlo.

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Terminamos de ver la película. Jouno estuvo casi toda la función aferrado a mí, pues la película era de terror, y, aunque él no lo pudiera ver, oía todo, y el ruido en la sala era demasiado para él.

Él ahora se encuentra dormido en mi espalda, sé quedó dormido en el camino para su casa, así que tengo que llevarlo cargando. Estoy deseando que su padre esté en casa, pues no tengo llave para entrar y dejarlo en su habitación.

Llego y, efectivamente, su padre se encontraba. Toco la puerta, él la abre y me deja pasar al ver que traigo a su hijo.

—Veo que se quedó dormido.

—Sí... Su hijo es realmente bello cuando duerme. —digo.

—En serio lo amas, ¿verdad? —me dedica una sonrisa.

—Obviamente —respondo —. Creo que mejor lo llevo a su cuarto para que descanse —subo las escaleras para dirigirme a la habitación.

Lo dejo en su cuarto, y le doy un beso en la frente. Duerme como un niño pequeño, es demasiado tierno... Me siento en la cama para acariciar su cabeza, es inevitable para mí no hacerlo.

Luego de unos segundos, entra su padre con una taza en su mano, la cual tiene chocolate caliente, y me la ofrece, la acepto y me quedo mirando, nuevamente, a Jouno.

—¿Siempre lo miras mientras duerme? —me pregunta, apoyándose en el marco de la puerta con su taza en las manos.

—A veces... Bueno, sí —confieso.

—¿Te quieres quedar a dormir? —me sugiere —. De seguro estás cansado como para volver a tu casa.

—Me encantaría, pero... no sé si debería —dirijo mi mirada hacia él.

—Bueno... Yo sólo sugería —sale de la habitación, pero se regresa y vuelve a hablar —: Ah, y otra cosa más.

—¿Qué pasa?

—¿Jouno ya te dijo que ha empezado a tomar vitaminas?

Abro los ojos, bastante sorprendido, ¿cómo que estaba tomando vitaminas? Y lo peor de todo, ¿por qué no me dijo? Él parece notar mi confusión, pues se me queda viendo para luego hablar:

—¿No... te ha dicho? —niego con la cabeza —. Oh... creo que no debí haberlo dicho...

—No se preocupe —me levanto de la cama —. Después hablo eso con él.

Me dedica una sonrisa, y sale de la habitación. Acaricio la cabeza de Jouno por última vez, le doy un beso en la frente, y me retiro del lugar.

Voy a ver si mañana puedo hablar sobre el tema de las pastillas con él, aunque supongo que no dirá mucho. Al menos, intentaré hacer que me diga la mayor parte.

◦•●◉✿ 𝐶𝑂𝑁𝑇𝐼𝑁𝑈𝐴𝑅𝐴́ ✿◉●•◦

Perdón si tardé un poco en actualizar, en serio lo lamento.

Esto es todo por mi parte. Nos vemos en otro capítulo.