¿Esto... es amor? [Suegiku y Kenjikyou]

Capítulo XXXV

-TETCHO-

Me encuentro preparando la comida para Jouno. Haruko y Kenji aún no regresan desde que Jouno volvió llorando, al parecer no volverán en un buen rato.

Termino de preparar el ramen, lo emplato y lo coloco en una bandeja para llevarle la comida a Jouno, quien se quedó dormido. Entro a mi habitación con la bandeja en las manos, la dejo en una pequeña mesa de noche y me siento al lado de Jouno para despertarlo.

—Despierta. Ya te traje la comida. —acaricio su cabeza y noto como se va despertando.

—No tengo hambre... —se frota sus ojos.

—Vamos... Se que tienes hambre.

—No —su estómago suena en ese momento —. Bueno... Sólo un poco... —agacha su cabeza, avergonzado.

Agarro la bandeja y la coloco ensima de él. Veo que no hace ningún intento de comer así que le doy de comer como si fuera un niño pequeño.

—Abre la boca. —extiendo los palillos para poder darle comida.

—¡Yo puedo comer solo!

—Tú y yo sabemos bien que no harás el intento de comer.

No dice nada más y sólo acepta que le dé de comer. Cuando acabó todo el plato se acostó nuevamente y se tapó una parte de la cara con su brazo, estaba apunto de tomarle una foto pero me lo impidió.

—Guarda-ese-maldito-celular. —dice cuando nota mi intención.

—Sólo iba a ser una foto.

—¡Tienes como mil fotos mias en tú celular!

—Claro que no —checo la galería de mi teléfono —. Son dos mil quinientas fotos, no mil.

—¡Eso es peor!

—Es que es difícil no tomarte fotos, te ves demasiado lindo como para desperdiciar el momento de una foto.

—Ash. Voy al baño. —se levanta de la cama y camina en dirección al baño. Se muy bien a que va así que voy impedírselo.

—No. —lo abrazo por la cintura y lo siento en mis piernas, dejándolo de espaldas a mí.

—Bien... Pero... ¿No puedo vomitar aunque sea un poco?

—¡Claro que no! —lo siento al lado de mí —. No debes de vomitar para "verte bien" —hago comillas con los dedos —, eres hermoso tal y como eres.

—Pero... No soy lindo, soy muy horrible y- ¡Ah! —muerdo su cuello y suelta un quejido —. ¡Deja de hacer eso!

—Cada vez que digas algo horrible sobre tí, lo haré.

—Pero...

-Nada de peros. ¿Quieres hacer algo?

—No lo se...

—Se me ocurre una idea —me acerco a él para besarlo pero me detiene —. ¿Qué pasa?

—No estoy de mucho humor para esas cosas, Tetcho...

—Pero sólo te iba a besar —noto como su cara cambia a una sorprendida —, ¿qué pensaste?

—N-nada.

—¿Pensaste que te quería coger?

—Emmm. ¡En mi defensa tú siempre quieres hacer eso, así que no me culpes por haber pensado eso! —me apunta con el dedo, yo suelto una pequeña risa.

—No te quiero violar a cada rato, depende de la situación.

—¿Cómo qué no? Cada segundo me quieres coger.

—Es que me provocas con cualquier cosa que hagas.

—Bueno... Creo que voy a dormir otro rato. —se acomoda en la cama y se tapa con la sábana.

—Aún es un poco temprano, pero bueno —me levanto para no molestarlo —. Descansa —me inclino y le doy un beso en la frente.

Noto como sus mejillas toman un color rojo bajo, aún no se acostumbra a los besos de buenas noches así que su reacción es curiosa. Salgo de la habitación para darle espacio y bajo a la sala, checo mi celular y tengo un mensaje de mis hermanos diciendo que en un rato llegaban.

Me puse a ver la televisión ya que no tenía nada que hacer, por un momento pensé en tomarle una foto a Jouno mientras dormía pero... Ya tengo varias así, creo que si tengo una pequeña obsesión con tomarle fotos pero... ¡Es que se ve bien tierno! ¿Cómo quieren que evite tomarle fotos?

Dentro de un rato llegaron Haruko y Kenji, nos pusimos a platicar los tres y procuraba que no hicieran ruido ya que mi novio se encuentra dormido. Cuando se hizo más tarde nos fuimos a dormir, yo encontré a Jouno abrazando un pequeño oso de peluche que casualmente tenía por ahí. Se ve tan hermoso que obviamente tuve que tomarle una foto.

Será la última...

Bueno, tal vez no.

◦•●◉✿ 𝐶𝑂𝑁𝑇𝐼𝑁𝑈𝐴𝑅𝐴́ ✿◉●•◦

Odio mi vida, estoy pensando seriamente en matarme pero... Tengo que terminar las historias que tengo, así que por ahora no.

Les conté a mis amigas sobre los traumas que tiene Jouno y me andan diciendo que lo tengo muy traumado ya pero... Nada es divertido sin traumas.

Y eso que faltan algunos más.

Bueno, hasta aquí mi reporte, Joaquín. Nos vemos en otro capítulo.