Capítulo XXXIII

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-JOUNO-

Siento como si estuviera a punto de desmayarme. No puedo respirar bien y mi mente no funciona en estos momentos. ¿Cómo era posible esto? Trato de pronunciar alguna palabra pero es bastante difícil.

—¿Qué... Qué haces aquí? —logro preguntar.

—Eso debería de preguntarte,,a tí —escucho como empieza a caminar hacia mí —. Esta es mi casa... Eso lo sabes.

—¡Pero es imposible! ¡Se supone que estabas en la cárcel!

—Estaba. Pero... Logré salir, y ahora que estás aquí ya no necesito nada más —me toma del brazo y yo lo aparto.

—¡No me toques! Estás loco si piensas que me voy a quedar contigo.

—Claro que te vas a quedar —me agarra y me atrae hacia él —. No tienes salida, estás atrapado aquí.

Consigo empujarlo y correr escaleras abajo. Trato de reaccionar rápido para poder escapar o encontrar un lugar donde esconderme. Me detengo cerca del sótano, estoy cansado y casi no tengo mucha resistencia.

No puede ser... Se está repitiendo otra vez... ¿Por qué la vida me odia tanto? Siento que ya estoy muerto, y también creo que va a ser peor que antes.

Escucho sus pasos y no tengo otra opción que entrar al sótano y encerrarme ahí, justo cuando iba a hacer eso siento que alguien me empuja con mucha fuerza. Caigo por las escaleras, recibiendo varios golpes por la caída.

—Ni pienses que te vas a librar de mí tan fácil. —escucho como cierra la puerta y me altero más.

—¡No me hagas nada! ¡Por favor, ten piedad! —retrocedo un poco. Él está apunto de decir algo pero mi celular empieza a sonar, genial, ahora ya tiene señal. Checo quien és pero él me lo impide.

—¡Dame eso! —no tengo otra opción y se lo doy con nervios —. ¿Quien es Tetcho? —pregunta al ver de quien es la llamada.

—Un amigo...

—¿Y por qué lo tienes registrado con un corazón? —me quedo inmóvil por un momento, ¿cómo iba a responder sin que se diera cuenta?

Quiero decirle la verdad pero... Tengo miedo... Bueno, quien tenga miedo a morir que no nazca, ¿no?

—¡Porque es mi novio! ¡¿Algún problema?! —me cruzo de brazos y me coloco enfrente de él para intimidarlo aunque sea un poco.

—¡¿Qué?! —me atrae hacia él pero ya no tengo miedo —. ¡¿En serio crees que alguien se fijaría en alguien como tú?! ¡Eres un asco! ¡Eso es una enfermedad, no puedes estar con alguien de tu mismo sexo!

—¡El asqueroso aquí eres tú! —me libero de su agarre —. ¡Yo puedo estar con quien quiera! ¡Además, tu también eres así cuando abusas de mí, y...! —recibo un puñetazo en la cara y caigo al suelo.

—¡Eres una decepción! ¡Nadie se fijaría en una asquerosidad como tú!

—Sólo me tienes envidia porque a mí alguien me ama y a tí no... —recibo esta vez una patada en el estómago con demasiada fuerza.

—Creo que necesitas una lección para que aprendas a no faltarme el respeto. —se acerca a mí pero trato de alejarlo pero no lo consigo.

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Me encuentro hecho bolita en una esquina del sótano mientras lágrimas caen por mis mejillas. Otra vez me golpeo y volvió a abusar de mí... Sabía que no iba a poder ser feliz nunca.

Lo escucho bajar nuevamente y me levanto rápidamente, si me ve llorando me golpeara otra vez, y no quiero eso.

—Ya me quiero ir...

—Tendras que deshacerte de mí primero si quieres eso. —me vuelve a agarrar pero esta vez con más fuerza.

Trato de soltarme pero no logro nada. No pienso darme por vencido tan fácil, saco toda la fuerza que tengo y lo agarro de la cabeza y lo golpeo con mi pierna. Lo dejo tirado por un momento y corro hacia la puerta.

Trato de abrirla pero está cerrada. Hago lo mismo que la obra vez: la rompo. Noto que mi padre se dió un golpe fuerte en la cabeza por el golpe que le di... Se lo merecía, la verdad.

Vuelvo a intentar abrir la puerta principal y esta vez si está abierta... Que suerte, pensé que me quedaría encerrado en este infierno otra vez. Salgo corriendo con unas lágrimas en mis ojos, no puedo creer que se haya repetido.

Corro directo a la casa de Tetcho, no me detengo ni en los semáforos. Llego y abro la puerta desesperadamente, Tetcho se encuentra ahí y me lanzo a sus brazos para echarme a llorar.

—¿Jouno?

—Volvió... Volvió, Tetcho. —escondo mi cabeza en su cuello y sigo llorando.

◦•●◉✿ 𝐶𝑂𝑁𝑇𝐼𝑁𝑈𝐴𝑅𝐴́ ✿◉●•◦

Quiero matarme ahora mismo. Ya no aguanto esta vida de mierda.

Bueno, les traigo otro capítulo, espero les haya gustado y... Nos vemos en otro capítulo.

¿Esto... es amor? [Suegiku y Kenjikyou]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora