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Charlize:

—¿Ron?—Me ofrece Uriel, quien esta a mi lado y niego con la cabeza.

El abre mucho los ojos y vuelvo a negar.

—No, no..—Aseguro.—Solo no me apetece beber.—Hablo solo para los dos.

Suspiro y vuelvo mi atención al grupo que  la mesa,  la comida ha quedado esparcida en algunos platos, aunque la mayoría completamente vacíos.

Me siento halagada de que los terminaran y que más de uno quisiera repetir, bostezo sin darme cuenta en medio de la conversación que se da y Dorian se da cuenta.

—Ya es tarde.—Se levanta y me ofrece la mano.

—¿Ya nos echa, capitán?

—Largo.

Se ríen y tomo la mano de Dorian, quien me termina guiando al pasillo y asi escaleras arribas.

—No se queden a dormir.—Ordena el en el arco de la puerta del comedor, pero antes de subir los oigo gritar, acompañados de risas.

—¡Que nos quedemos!



(***)


Paso el cepillo por mi cabello y me giro detrás de mi al sentir la mirada de mi esposo, Dorian esta sentado sobre el colchón con los ojos puestos en mi y una expresión seria en su rostro, no lleva camisa y solo trae los pantalones de dormir.

—¿Qué?—No oculto mi sonrisa y dejo el cepillo sobre la cómoda.

Se me queda viendo y me sonrojo, sonrio y doy una vuelta.

—¿Admiras lo atractiva que es tu esposa?

—Lo hago.

 Llevo el vestido de dormir y traigo mi cabello rubio suelto, medio peinar, en conclusión me veo como un desastre y para el luzco hermosa. 

Sus palabras me ruborizan más.—Dorian...

—Eres muy hermosa.

Sonrio y dejo el cepillo para unirme a la cama con el, las manos de Dorian me quitan el vestido y termino desnuda bajo sus brazos, mientras sus ojos me recurren el cuerpo.

—Tengo tanta suerte.—Me dice orgulloso y mi corazón se acelera, los dos lo tenemos en realidad.



(***)




Mi dedo aprieta el gatillo de la pistola y lo siguiente que veo el agujero debajo de los circulos de madera que coloco Dorian en el jardín trasero para practicar.

No se cuantos tiros voy, pero...

—No es verdad...—Pronuncio y escucho su risa junto a mi oreja.—¡Lo hice!

Tengo a Dorian sujetando el arma conmigo y hemos estado practicando toda la mañana, aunque se me da fatal la puntería, a diferencia de el.

Suelto el arma y me vuelvo hacia mi esposo.

—Si.—Me responde observando la madera destrozada en el suelo.—Solo te tomo.

—¡Hey!—Lo detengo.—Para alguien que recien esta aprendiendo es un buen comienzo.

Hace un gesto y me ofendo.

—¡Dorian!

—¡Capitán Dorian!

Ambos nos giramos hacia la persona que nos llaman, son algunos de nuestros vecino, pero también esta Cole y Jerome con ellos. 

Dorian se vuelve hacia mi.—Enseguida regreso.

Asiento aunque la sonrisa se me borra, me quedo en medio del jardín mientras lo veo hablar con el grupo.

—¿Sucedió algo?—Jocelin aparece cargando más ropa en una canasta.

—No, solo desean hablar con Dorian.—Contesto.—Ven, déjame ayudar.

La llevo conmigo hacia los tendederos, pero solo logro tender dos sabanas cuando Dorian esta de regreso, Jocelin pide permiso para retirarse y volvemos a quedarnos solos, aunque las personas no se han movido detrás de nuestra cerca.

—¿Pasó algo?

—No, si.

—¿Qué?—Sonrio.

—Tengo que volver al Mastín.—Pronuncia y mis ojos se abren mucho.

—¿Tan pronto?—Las palabras se me escapan, supongo que el no establecer un tiempo me hizo imaginar que seria más...

Trago saliva.

—Entonces ... ¿Cuándo partimos?

—Parto.—Me corrige y lo observo confusa.—Solo iré yo, Charlize. 




Se acercan los problemas y más vale que teman xD

Nos leemos.

>>Yiemir.

Atada al Error ( #1 Jóvenes casaderas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora