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Capítulo final:

Charlize:

Despierto en un camarote y por las paredes que reconozco no tardo en darme cuenta que es el Mastín, volteo el rostro hacia la ventana y aunque esta oscuro, alcanzo a escuchar el sonido de las olas del mar, tan tranquilas que nos hemos cruzado al viajar.

—Capitana, que alegría. —La puerta se abre y es el doctor del barco quien aparece.

Uriel se acerca mientras me incorporo sentándome sobre la cama.

—¿Descanso bien? Hace unas horas paso la tormenta y deseaba ver como estaba, aunque me disculpo por entrar así. El capitán me dijo que solo la observara por la ventanilla de la puerta, pero no puedo evitar estar feliz de que este aquí.

—Está bien, yo...—Me llevo la mano al vientre.

—Tranquila, ambos están bien.

Me llevo una mano a la cabeza. —Recuerdo que me golpeo y.. —Me viene un recuerdo de Dorian y el comodoro. —¿Y Dorian? El..

—Pude estabilizar su quemadura en el brazo, no puedo decir que no quedaran cicatrices, las demás que obtuvo son menos que esta. —Contesta. —Pero se pondrá bien, en cuanto lleguemos a la isla, podre acelerar su curación con hiervas.

—Gracias..

Intento pararme.

—¿Segura qué? —Me toma la mano para ayudarme.

—Gracias y si puedo... ¿Dónde estamos ahora?

—Cerca del archipiélago.

Asiento.

—¿Y Dorian donde esta?



(***)



—¿Qué haces de pie? —Dorian me reclama y lo único que yo hago es mirar el vendaje en todo su brazo, vendaje que también lleva en el tórax y en la cabeza.

—Esperaba ser lo primero que viera al despertar. —Pronuncio y su rostro cambia.

—No creí prudente despertarte y alguien debe dirigir esta nave, protejo el Mastín y te protejo a ti...—Baja la mirada a mi vientre. —Y a nuestro hijo.

Sonrio despacio, logro captar los barcos que navegan cerca de nosotros y algunos mucho más lejos, todos regresando.

Una vez más me vuelvo hacia mi esposo.

—Has tenido un viaje interesante mientras no estaba.

Respiro profundo.

—Has hecho todo esto estando embarazada.

—¿Es pregunta?

—Ya Cole me puso al tanto. —Ubica su mirada cerca a la borda y mi mirada lo sigue, es Cole quien nos observa.

Me vuelvo una vez más hacia él.

—No debí hacerlo ¿Eso piensas?

—Apenas comprendo lo que hiciste. —Pronuncia sin creerlo y yo rio.

—Soy tu esposa. —Contesto. —¿Piensas que me iba a quedar de manos cruzadas sin hacer nada? Y también soy una pirata. Es el título que me diste al reclamarme...

Siento su mano viajar a mi vientre y me sobresalto con el roce.

—Aún es muy pequeño. —Digo mirando el lugar y mi mano acaricia la suya.

—Cuando lo dijiste, sentí...—Traga saliva. —Sentí muchas emociones. Miedo porque estuve a punto de perderlos a ambos, alegría ...—Sonrio al escucharlo.

Los ojos se me llenan de lágrimas.

—Llevo al hijo del capitán Dorian Dragomir, un pirata. —Le recuerdo. —Un hijo de ambos, un poco más de fe, por favor.

Sonríe despacio.

—Lamento no haberlo dicho en el momento, pero...no era una noticia que quería compartir en el momento. ¿Me perdonas?

—Lo único que me interesa ahora es que ambos están bien.

—Y a mí que tu estés aquí, a mi lado, como debe ser, Dorian.

La neblina a nuestro alrededor se dispersa poco a poco y ambos nos volvemos hacia lo que tenemos en frente y es una de las islas del archipiélago, los tripulantes celebran y me vuelvo hacia él.

—Bienvenido a casa, esposo mío.—Pronuncio y el cierra el espacio que nos separan.

Mi mirada baja a sus labios mientras veo como se acercan a los míos, me besa y el "alboroto" rodea el barco, Dorian maldice en mis labios y rompo el beso para volverme hacia la tripulación, quienes solo por enojarlo celebran más alto.

Silban y celebran, me hacen reír y no oculto mi felicidad, me giro hacia mi marido una vez más y lo tomo del cuello para besarlo de nuevo, beso que me corresponde mientras volvemos a nuestro hogar.



Nos leemos en el epílogo.

>>Yiemir.

Atada al Error ( #1 Jóvenes casaderas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora