Desapercibida (Adaptada) / SIN TERMINAR

Capítulo 26 (Segunda Temporada)

[Maratón 4/5]

"Please, stay."

Es cierto, completamente cierto que lo hago solo por él. Si bien estoy cansada de tener que ocultar los cortes y poner excusas cuando me toman por las muñecas y grito, no me importa hacerme daño porque es lo que merezco. Pero no creo que Julian merezca sufrir más de lo que lo hace, por mi culpa. Y si a él le duele que lo haga, pues el mejor remedio es no hacerlo y dejarlo que se sienta mi héroe. Es mi héroe.

-Tienes que dejar de hacerlo por ti, no por mí, Oriana.

Niego con la cabeza.

-Puedo dejar de hacerlo por ti, pero no por mí. A ti te amo, yo me odio.

Cierra los ojos como si le doliera mucho escuchar esas palabras y cuando los vuelve a abrir me mira directo en los míos. No sé qué decir o hacer.

- ¿No estás cansada de eso? -Pregunta.

Muerdo mi labio inferior cuando suspiro.

-Estoy cansada, pero aún así lo necesito.

-Es que no lo necesitas.

-No lo entiendes, Juli.

Lo veo negar con la cabeza y a continuación alarga el brazo para agarrar la cadena de mi hamaca y juntarnos. Cuando me suelta, ambas hamacas se balancean y luego chocan en el punto de partida. Rio divertida cuando subo las piernas a la madera para no lastimarme, Julian se aleja del choque.

-Explícame entonces -dice menos tenso.

-Es que no puedes entender algo que no te sucede.

-Intenté hacerlo, pero no pude. En serio no pude clavarme nada, no pude pasarme nada.

De solo pensar en el hecho de que Julian se hiciera daño, se me llenaron los ojos de lágrimas. Así debía sentirse él cuando veía que yo me hacía daño.

-No lo hagas.

-Tú tampoco -murmura.

Alzamos la vista al mismo tiempo. Pasa la lengua por sus labios y vuelve a tomar la cadena de mi hamaca para juntarnos. Sin dudar un segundo, paso mi brazo por sus hombros y cuando quiero acordar Julian ha hecho una maniobra para tenerme sentada sobre sus piernas.

-Inténtalo.

Asiento.

-Por ti, no por mí.

Pero lo cierto es que no puedo hacer algo por alguien a quien no amo, en cambio por Julian podría hacer mucho. Él entierra su rostro en mi cabello y se queda allí durante unos segundos estático en el lugar, luego recorre mi cuello con su nariz hasta llegar a mi mejilla y planta un beso allí.

-Por más cursi que suene, quiero estar así contigo para siempre.

Una pequeña sonrisa florece en mis labios y dejo caer la cabeza sobre su hombro. Con su mano acaricia la mía.

-Yo también quiero.

Podría decirse, literalmente, que pasamos la tarde sentados en una hamaca diciendo cosas cursis y dándonos besos como dos estúpidos enamorados. Comienza a parecerme que Julian me necesita mucho más de lo que yo lo necesito a él, por la forma en que me abraza cuando ve que las cosas no van bien, por la forma en que me besa pidiendo desesperadamente cariño.

- ¿Paso por ti mañana? -Pregunta frenando frente a mi casa.

Asiento dando vueltas el corazón de mi collar entre mis dedos, me bajo de la moto dándole el casco a Julian y sin dudar un segundo me inclino hacia él para besarlo en los labios. Corresponde el beso y lo profundiza apoyando su mano en mi nuca para acercarme más a él.