Vínculos Profundos

Hogar

Cuando Louis llega a la casa de Harry, se toma un momento para quitarse los zapatos y el abrigo, liberando un suspiro de alivio por el fin del día.

-¡Harry, ya llegué! -grita con un dejo de cansancio en su voz-. Hoy ha sido un día muy peculiar. En primer lugar, esa junta con los inversores, luego mis cosas en tu oficina ¡que deberías haberme comentado! Y luego Liam y Niall llamándome diciendo que si no te decia que si probablemente te suicidarías. ¿De qué me perdí y por qué mis mejores amigos tienen más contexto de mi relación que yo? -expresa, mientras avanza hacia el comedor, desahogando sus frustraciones-. Porque realmente me parece que es muy ina... -sus palabras quedan suspendidas en el aire al percatarse de Harry, erguido frente a la mesa, la cual está especialmente adornada con un único tulipán en su mano, una imagen que lo deja momentáneamente sin habla.

Harry se queda en silencio, con el tulipán en la mano, observando a Louis con una mezcla de sorpresa y nerviosismo. La atmósfera se carga de una tensión palpable mientras Louis procesa la inusual escena frente a él.

Después de un breve instante de desconcierto, Louis se acerca lentamente a Harry, con la mirada fija en el delicado tulipán que sostiene en su mano temblorosa.

-Harry, ¿qué está pasando aquí? -pregunta Louis, su tono lleno de curiosidad y una pizca de ansiedad.

Harry traga saliva, buscando las palabras adecuadas para explicar la sorpresa que ha preparado con tanto cuidado.

-Louis, sé que ha sido un día agotador para ti. Solo quería... quería hacer algo especial para ti -responde Harry, con voz suave, desviando la mirada por un momento antes de volver a encontrarse con los ojos de Louis.

La expresión de Louis se suaviza al comprender las intenciones de Harry. Un destello de cariño y gratitud brilla en sus ojos mientras se acerca más a su pareja.

-Harry, no necesitas hacer cosas extravagantes para mí. Tu presencia es suficiente para alegrar mi día -dice Louis, extendiendo su mano para tomar suavemente el tulipán ofrecido por Harry.

Los dos se quedan mirando el tulipán por un momento. Louis se siente un poco nervioso mientras intenta encontrar las palabras adecuadas.

-En realidad... no era solo eso. Yo- tartamudea-, preparé la cena, espero que te guste. Y quería preguntarte algo...-

-No me digas que me estás por proponer matrimonio, porque juro que te mato -bromea Louis, intentando aliviar la tensión del momento.

-No. Yo em... quería, quería preguntarte si te gustaría vivir conmigo. Aquí, en esta casa -termina Harry, su voz cargada de emoción y vulnerabilidad.

Louis se queda en silencio por un momento, dejando que las palabras de Harry se asienten en su corazón. Una sonrisa luminosa ilumina su rostro mientras se acerca a Harry y lo abraza con ternura.

-Claro que sí, Harry. No hay ningún lugar en el mundo donde prefiera estar más que contigo -responde Louis. -¿Realmente pensabas que iba a decir que no? - ríe, su tono rebosante de complicidad.

-Estaba nervioso, lo siento -susurra Harry con un puchero en sus labios.

-Esta bien, alfa. Te amo.- susurra besando los labios del mayor.

-Y yo a ti, omega -responde Harry, devolviendo el beso con dulzura. -No se porque estaba tan nervioso- dice mientras toma la mano del omega y lo ayuda a tomar asiento -después de todo...prácticamente vivimos juntos.-

Louis asiente con una sonrisa, sintiendo el cálido vínculo que comparten aún más fuerte que antes.