Parte 57.- Ben Hope (de Slytherin) - ¿Es justo?

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Desde aquí la desgracia de esas pobres personas se manifiesta a través de los borborigmos de sus estómagos. El hombre de Estados Unidos detiene las mordidas al asado de esa espantosa carne, para recobrar fuerzas y dar el último bocado.

El presidente de Rusia está sentado, con el plato vacío frente a él, y sus manos ocultando la vergüenza que siente por haber ingerido lo que le habían ordenado.

El moderador de la ONU yace con la mirada completamente ausente, apreciando los cubiertos con escasos restos de este repulsivo platillo.

La hamburguesa frente a mí tiene manchas negras por las balas que la atravesaron. Las que casi me atraviesan a mí. De cualquier forma... creo que no me la habría comido. Mi paladar no hubiese podido saborear absolutamente nada al ver cómo estas personas sufren por saber lo que ocurre con sus familias. Cómo el mundo sufre.

Y de vez en cuando me invade la duda...

¿Qué estoy haciendo? ¿Por qué estos muggles me importan en lo más mínimo? ¿Por qué habrían de importarme mis excompañeros de Hogwarts? A ninguno de ellos le interesé, igual que mi familia. Ahora veo lo ridículo que se oye que la comunidad mágica haya puesto sus ojos en mí al destacar en el ridículo Torneo de los Tres Magos, cuando yo verdaderamente necesité la ayuda de mis maestros mucho antes de eso.

Ahora veo que es aún más ridículo el cómo fue aún más destacable en mi historia el que yo haya sido un engreído con mis seres queridos; borrando cualquier otro logro o atributo que yo pudiese tener.

Mcgonagall se encargó de hacerme sentir como una basura cuando Nick Nelson me acusó por la forma en que trataba a  Charlie. El rumor se dispersó entre Gryffindor, Ravenclaw e incluso los mansos de Hufflepuff tomaron partido.

Para Spring, fue el final feliz, el momento en que logró deshacerse de mí y encontrar lo que siempre buscó con Nick. Fueron sus momentos de "empoderamiento" los días en que, por más que intentara pedirle perdón, él solo me recordaba lo cruel que yo había sido. Para mí... parece que el mundo estaba orgulloso de ver que mis logros caían uno a uno en una especie de "Karma".

Y ahora... solo gracias a que mi maestro ha sido muy precavido con la información que se logra filtrar sobre mí, es que mi cabeza no está también en la lista de eliminación de los muggles.

¿Entonces...? ¿Deberían de importarme? ¿Es justo?

--Eres más fuerte de lo que creí niño –me elogia Darth Sidious--. Creí que mojarías los pantalones cuando te dispararon. Pero no lo hiciste. Y en su lugar... intentaste montar resistencia. Ahora quisiera preguntarte... ¿Sabes cuál es el motivo por el que estas personas están a punto de volver el estómago?

La respuesta es evidente. No creo que sea un plato fácil de digerir. Pero eso no es lo que mi maestro quiere escuchar.

         --No lo sé. Señor.

         --Es muy simple, querido aprendiz. Ellos jamás creyeron que tenían que hacer algo tan cruel para lograr asegurar el bienestar de los suyos, o incluso el propio. Ahora... ¿Quiéres que te muestre lo que es una esperanza destruida? ¿Cómo las creencias de una persona sobre sí misma pueden desplomarse?

El contador marca el final del tiempo otorgado para comer los platillos: 00:00.

Y sin un segundo de retraso, diez stormtroopers ingresan a la sala de reunión, arrastrando los cadáveres de los muggles armados con fusiles, previamente decapitados por mi maestro; mientras que uno de ellos se aproxima a nuestra localización.

         --Teniente Kyler al frente. Misión cumplida señor. Listos para la siguiente fase de sus órdenes –nos dice la mujer bajo el casco blanco--. Comandante Hope, su área de descanso lo espera en la nave del almirante Tarkwon, el transporte también lo espera en cuanto usted desee.

         --Quédate un poco más, querido Ben –se dirige hacia mí mi maestro--. Aún hay algo que tienes que ver. Es lo que nos espera fuera de este edificio.

¡BEEP! ¡BEEP! ¡BEEP!

El agudo y ensordecedor sonido del comunicador de la soldado nos interrumpe.

         --¡Teniente Kyler! ¡Múltiples detonaciones en varios puntos de la ciudad! ¡Repito! ¡Múltiples detonaciones en varios puntos de la ciudad!

         --¡Status!

         --¡Un AT-AT caído! ¡Stormtroopers lesionados frente al Hospital General! ¡Perdimos contacto con los vigilantes del MACUSA! ¡Número de atacantes no esclarecido! ¡Posible compromiso de la seguridad del Emperador!

         --Recibido –apaga Kyler su comunicador--. Emperador, comandante. Tenemos que sacarlos de aquí.

Palpatine inhala lentamente, extendiendo su cuello y moviéndolo para que de ligeros crujidos, haciendo que su rostro le de cara al techo.

--Como dije anteriormente... aún hay algo por hacer, teniente. Es hora de que la ridícula fe que este planeta tiene pague a través de estos estúpidos políticos. ¡Es hora! ¡Todos afuera! ¡¿Me escucharon?! ¡Los quiero a todos afuera! ¡Presenten ante nosotros a las familias prisioneras!

Entonces yo vuelvo a preguntármelo. ¿Es justo que yo me angustie por ellos? ¿Por estas personas que no conozco?

¿Merezco yo el perdón de la humanidad por haber traído a este hombre, que ahora rige el planeta como el Apóstol de la Oscuridad?

Creo que la respuesta a esta última pregunta por parte de mi probablemente muerta madre, la respuesta de mis compañeros en Hogwarts y la respuesta de todo aquel que me conozca por mis acciones sería exactamente la misma.

"No. No mereces que te perdone por lo que has hecho".

Y es por tanto, que creo yo, tener la respuesta para la primera pregunta que me hice. Tal vez... solo tal vez.

Heartstopper  ApocalipsisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora