ACT ONE
(Nada es lo mismo)●•●
Habían pasado días desde aquel fatídico suceso que lo cambió todo. Días en los que Yuuko Zenin no derramó una sola lágrima.Parecía otra: en silencio, inquieta, con ojeras que delataban sus noches de insomnio. Evitaba a sus amigos, que aún no se atrevían a hablar directamente de lo ocurrido.
Y ella tampoco quería hablar de ello, fingiendo que nada había pasado. Pero solo era eso, una ficción. Porque nada volvería a ser igual.
Estaba en negación total, creyendo que todo era una pesadilla. Esperando que Toji la contactara de nuevo como siempre.
Pero esta vez era distinto. Su hermano había desaparecido para siempre de su vida. Ya no volvería como tantas veces antes.
Caminaba errante sin rumbo fijo, día y noche, tratando de rellenar el vacío con actividad. Sin encontrar descanso para su atormentada mente ni su angustiado corazón.
Tras aquel fatídico día, Yuuko intentó reanudar su vida cotidiana. Mas dentro sentía un vacío que amenazaba con devorarla.
Externamente aparentaba ser la misma estudiante disciplinada y enfocada de siempre.
Sus misiones las cumplía en solitario por el momento, hasta sanar sus heridas internas. Una de ellas acababa de concluir con éxito, como de costumbre.
Caminaba pesadamente por los desiertos pasillos nocturnos cuando la grave voz del Maestro Yaga la detuvo.
—Yuuko.
Se volteó para encontrarse con su mirada seria, donde entre las sombras se filtraba la preocupación. Supo que presentía su dolor.
Inclinó levemente la cabeza en gesto respetuoso. Esperó en silencio que le mostrara el motivo de su llamado.
—Bien hecho en la misión.— Dijo el Maestro Yaga con calma.
—No importa.— Murmuró ella reanudando la marcha.
Yaga sabía que restaba valor a sus éxitos para ocultar el dolor. Quería reconfortarla, mas supo que Yuuko no estaba lista para recibir consuelo. Antes que enfrentar su pena, elegía seguir huyendo.
La comprendía. Esos eran los pasos naturales del duelo. Y sólo el tiempo sanaría sus heridas.
—Yuuko.— La llamó con gentileza. —Deberías tomarte un descanso.
—Estoy bien, maestro.— Dijo ella con parquedad. —Le deseo buenas noches.
Yaga asintió serenamente. Sabía que por ahora erigiría muros para defenderse del dolor. Respetaría su espacio hasta que juntara fuerzas para sanar.
ESTÁS LEYENDO
𝐒𝐭𝐚𝐲 𝐖𝐢𝐭𝐡 𝐌𝐞 || ᴶʲᵏ
Fanfiction𝐸𝘴𝘵𝘢𝘣𝘢 𝘴𝘦𝘭𝘭𝘢𝘥𝘢 𝘦𝘯𝘵𝘳𝘦 𝘭𝘢𝘴 𝘤𝘦𝘯𝘪𝘻𝘢𝘴 𝘥𝘦 𝘲𝘶𝘪𝘦𝘯 𝘮á𝘴 𝘭𝘢 𝘢𝘮ó. - ˢᵃᵗᵒʳᵘ ᴳᵒʲᵒ