Aquí podréis encontrar algunas historias cortas sobre algunos de los pilotos de F1.
No soy experta en F1 por lo que pude haber errores y cosas incoherentes, pero espero que les gusten tanto como a mí escribirlos.
Todas las historias han sido fruto...
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(Las conversaciones en cursiva son en inglés)
Bela Martínez
Silverstone, Inglaterra 📍
La semana había sido demasiado larga, sin embargo, aún me quedaban muchas horas antes de que mi jornada laboral llegará a su fin.
— Han venido todos los pilotos, John le ha preparado el salón solo para ellos. Y me ha dicho que te diga que me debes acompañar— me explicó Nora, mi compañera de trabajo y única amiga aquí.
— Eso significa que hoy no tenemos descanso para comer — suspiré mientras escuchaba la roda de Nora.
Mi relación con los pilotos era demasiado especial, quizás porque nunca me había acercado a ellos. Pertenecíamos a mundos muy diferentes y la vida me había enseñando a no juntarme con personas que no pertenecían a mi mundo. Siempre que podía me escapaba de esas comidas, sin embargo hoy no iba a poder suceder.
— Anda vamos que deben estar a punto de llegar —
Trabajar para uno de los únicos restaurantes que seguía la rutas de las carreras de fórmula 1 era especial, aunque sin duda no era lo que me había imaginado ser cuando era pequeña. Pero después de todo, mi trabajo me permitía viajar y conocer muchos lugares con los que siempre había soñado.
Los pilotos no tardaron en entrar al salón, mientras que Nora y yo terminamos de preparar la mesa.
— ¿Lista? — susurró Nora a lo que negué con diversión
— ¿Cambiaría algo si lo estuviera? — pregunté antes de acercarme a la mesa.
— ¿Eres nueva aquí? — preguntaron algunos cuando me vieron acompañar a Nora.
— No — me limité a contestar — ¿Sabéis lo que vais a pedir para comer? En el menú del día tenemos ... —
Intenté pensar que este trabajo solo era un proceso y que antes de que me diera cuenta estaría cumpliendo mis sueños. Sabía que no iba a ser fácil, pero al menos me aliviaba un poco pensar que este sufrimiento se acabaría pronto.
Durante la comida me limité a poner mi mejor sonrisa, y a servir las peticiones de los pilotos.
— ¿Eres Bela, verdad? — preguntó Lando una de las veces que me acerque a la mesa — Nora nos lo ha chivado —
— Así es — dije — Tú debes ser el británico, ¿No? —
