—Yo te sugiero que te alejes de Paul. No es ético entablar una amistad con él, sabiendo que es parte de tu trabajo.
Me detuve justo antes de llegar a la cocina cuando escuché la voz de Samantha. John habló casi de inmediato:
—Ya él no es parte de mi trabajo. Dejó de serlo el día que le conté toda la verdad.
Era increíble como cada palabra que decía John me hacía emocionarme como un tonto.
—Pero aún así no deberías tener esa clase de afecto ni cariño hacia él. Lo único que haces es atender a su llamado lastimero todo el tiempo y eso sólo va a perjudicarte a ti en un futuro.
—¿Perjudicarme en qué aspecto?
Hubo un silencio.
—Mmh, bueno —contestó ella por fin—, algún día vas a tener que dejarlo, ¿no? Y será un lío porque Paul tiene problemas y trastornos mentales.
—Me encargaré que reciba ayuda.
—No puedes sólo solucionarle toda la vida.
—Haré lo que pueda.
El silencio volvió, y esta vez escuché pasos. Antes que pudiera alejarme para no ser visto, Samantha salió de la cocina y dio un ligero brinco al darse cuenta de mi presencia.
Pasó de largo sin decirme nada, mientras que yo me adentraba a la cocina. John estaba de pie en la barra, picando unas frutas y echándolas a la licuadora.
—Paulie, hola —se sonrió—. Buenos días. ¿Quieres desayunar?
—¿Recuerdas la vez que nos dimos un beso y Samantha nos vio?
John se echó a reír, y asumiendo que había escuchado todo, asintió.
—Sí.
—Me dijiste que ella no iba a decirle nada a Stephen porque supuestamente tú le gustabas y te quería mucho, ¿cierto?
—Mmh, bueno, te dije algo así... Sí.
—¿Entonces tú le gustas a ella y por eso actúa así conmigo?
—No —volvió a reír—. Te dije eso porque no sabía cómo decirte que ella no iba a decir nada del beso porque básicamente era mi objetivo en ese entonces. Así que inventé eso para tratar de encubrir todo. A Samantha no le gusto... o por lo menos no me ha dicho nada.
—Ah. Estoy tan confundido... Ni siquiera sé si puedo creerte o no. No sé si creer las cosas que me has dicho y las que ahora me dices. Es más, ni siquiera sé si te llamas John Lennon.
Él se mantuvo mirándome fijamente por breves segundos. Tenía un semblante de decepción y de frustración, la cuál drenó cuando vino a mí para abrazarme.
Me rodeó con sus brazos y yo correspondí a gusto a su abrazo.
—No sé cuantas veces deba pedirte disculpas por todo lo que te hice pasar, pero te las pediré las veces que sea necesario hasta hacerte sentir seguro conmigo.
Besó mi frente cuando nos separamos.
—Y sí, sí me llamo John. —Dijo, encendiendo la licuadora.
—Por un momento creí que era un nombre falso.
—No. —Rió—. Stuart sí usa un nombre falso porque está trabajando en la empresa de Stephen, y obvio no puede exponerse tanto. Bueno, no es falso, es sólo su otro nombre y su nacionalidad. Pero yo sí me llamo John Lennon, sí nací en Liverpool y todo lo que te he dicho de mí es real.
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Stolen Kisses ➳ McLennon
FanfictionEs que ya no sabía cómo verlo y fingir que no sentía nada. Se prohíbe su copia y/o adaptación. Todos los derechos reservados. Fecha de inicio: 29.01.2024 Fecha de culminación: 03.09.2024