𝐍𝐎𝐂𝐇𝐄𝐒 𝐁𝐋𝐀𝐍𝐂𝐀𝐒 (𝐃𝐞𝐦𝐨𝐧 𝐒𝐥𝐚𝐲𝐞𝐫)

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La pelirroja jamás se había sentido tan mal, la falta de sol, de aire fresco, la estaban afectando, la comida que Douma le daba causaba desconfianza, la chica se mataba de hambre debido al odio que le tenía, incluso su salud se fue deteriorando, cada mañana despertaba tosiendo sangre, otras con náuseas. Douma se veía preocupado, o al menos eso quería demostrar.

—-Mi bella flor de cerezo, te ves tan apagada, que duele verte así, ¿Quieres un regalo de bodas?

Hanako se había rendido, había olvidado los días en los que ya había desaparecido del lado de su esposo, había perdido la esperanza de ser libre, en una parte, ella lo sentía bien, nadie arriesgaría su vida por ella, nadie moriría por su culpa, no se atrevió a siquiera asentir, solo Douma la tomó de la mano para llevarla lejos.

—-¿Te gustan las horquillas no es así? Puedo leer tu mente, se lo mucho que estas cosas te encantan.—-Douma sacó de su bolsillo varias horquillas, de las cuales fueron arrebatadas de varias mujeres que el devoró.

—-No quiero nada si lo arrebataste de personas inocentes.—-.Hanako miró las horquillas, de un manotazo las aventó a un lado, detestaba estar siendo prisionera de él, algo que a Douma le encantaba era verla tan vulnerable, tan rota.

—-Vamos preciosa, eres mi prometida, mi único objetivo es verte tan feliz, ¿Por qué no me aceptas de una buena vez? Te prometo la felicidad eterna, serás hermosa y joven por siempre solo si accedes a convertirte en demonio.—- Douma beso las manos de Hanako de forma extrañamente amable, Hanako por su parte se sentía asqueada, pero por amor a Giyu, ella había decidido aceptar su propuesta de matrimonio, solo para mantener al hombre que ella amaba a salvo.

——La vida humana es hermosa cuando se permite el paso del tiempo, crecer, envejecer y morir está en la naturaleza humana, esa es su belleza y yo estaba compartiendo mi vida con alguien, tú me arrebataste mi felicidad.

Ella no lo miraba a los ojos, la chica mantenía una mirada baja, así deprimida, su luz se había apagado desde el día que la rapto.

——Ni siquiera en estas semanas que has estado conmigo haz logrado sentir siquiera un poco de cariño por mi, es una pena, no quiero que mi bella flor se marchité.—- Douma le beso la mejilla donde al dejarla sola, la chica corrió inmediatamente hacia la ventana, su cuervo entró en ella solo para recibir su carta y marcharse lo más rápido posible, estar secuestrada tenía un punto a su favor, podía pasar como espía entre demonios, cada que tenía la oportunidad enviaba cartas a Shinobu para mantener su plan, al igual que siempre le enviaba cartas de amor a su esposo, presentía que su libertad podría llegar en cualquier momento, incluso si ella no viviría hasta la vejez con el amor de su vida, al menos le daría la felicidad que podría. El plan que armó con Shinobu iba bastante bien, pese a que se veía demasiado triste, enviar a Yuki como mensajero servía de ayuda, mientras su esposo podía estar en calma, leer las cartas de de Hanako lo hacían sentir paz pese a que estaba preocupado, confiaba en que ella estaría bien.

—-Señorita, el amo Douma le ha traído esto.—-

El humano que trabajaba para el le había llevado comida, dulces, bebidas, todo lo que ella pudiera necesitar, Hanako miró con desconfianza al humano, el cual hizo una reverencia ante ella.

—-El señor Douma la ama de verdad, el me pidió que trajera comida para usted, confié en que esto no está envenenado, al contrario, debe recuperar energías, lleva varios días enferma y en unas horas un médico vendrá a verla, el solo quiere su bienestar.—— El hombre dejó sola a la chica, nerviosa se acercó al plato de comida, se veía realmente apetecible, sin dudarlo empezó a comer, rogaba que nada humano hubiese ahí.

—-Veo que mi princesa tiene hambre, come cariño, realmente lo necesitas.—- El demonio entró para hacerle compañía, aunque la pelirroja no contestó, comer era algo que le hacía falta, al final detestaba terminar con náuseas debido al estrés que cada día sufría.

——¿Porque estás tan obsesionado conmigo? Soy una humana de las que tanto aborreces, además, no creo que a tu señor Muzan le agrade que tengas a una cazadora como supuesta prometida, tomando en cuenta que soy descendiente del cazador que logró causarle miedo.—— Douma dio una risa por su comentario, para el le era difícil creer que Muzan tuviera miedo, pero era la pura verdad, Muzan temia a los cazadores, verla a ella sería un problema, moriría en segundos.

——¡No te preocupes por el! .El te aceptará si accedes a ser demonio... ¡Tienes el alma y la fortaleza para ser una luna creciente! Ahora que ya perdimos a cuatro, estoy segura que el los aceptará!.— Douma le tomó de ambas manos, buscando de una manera convencerla de ser una demonio, sin embargo ella se negó, no estaba dispuesta a aceptarlo.

—-¿Qué hace falta decir que no me interesa ser un demonio? Quiero una vida normal, quiero tener una familia, envejecer, vivir como debe de ser.—— La chica retrocedió una vez más, le era difícil confiar en el, también se sentia sumamente culpable al estar entre los demonios y los cazadores, era difícil para ella ser una espía para armar el plan de su amiga.

—-Eso está por verse cariño, come todo lo que trajeron para ti, necesitas energías, además debemos poner en práctica el don que te di, si vas a ser un demonio en el futuro, tengo que estar seguro que sepas defenderte.—- Douma le ofreció la mano de forma afectuosa, la chica sabía que debía buscar sus puntos débiles, quizá si fingía estar de su lado, de acceder a sus caprichos todo saldría bien.

Después de todo, estaban buscando una cura para ella.

Hanako tomó de manera temerosa la mano del demonio, quien al ver que ella accedió, no desaprovechó su oportunidad de abrazarla, de tomarla con fuerza pero sin llegar a lastimarla, realmente disfrutaba de la compañía de la chica.