Sé mi luz (Jikookmin)

40

Park yacía en la cama con el teléfono en las manos, esperando una respuesta de Jungkook. Pronto su sedante favorito abandonará su casa y tendrá que volver a acostumbrarse a las pesadillas. Hacía mucho tiempo que no dormía tan tranquilo como en los últimos días. Le gustaba primero atormentar al chico con besos y luego quedarse dormido abrazándolo. Me encantaba olerlo en mis sábanas. Es una pena que esto vaya a terminar. 

De repente, el ascensor emite un pitido, lo que significa que alguien está intentando subir a su apartamento. ¿Quién podría ser? Sólo unas pocas personas más cercanas conocen esta dirección. Jimin se tensa y se levanta de la cama, bajando las escaleras hacia las puertas. Mira la pequeña pantalla en la pared, donde puede ver a la persona que llama debajo, y suspira profundamente, agachando la cabeza. ¿Qué esta haciendo él aquí? El chico se relaja, porque solo es Yoongi. Hace mucho que no se ven, tal vez sea hora de hablar. Involuntariamente baja la mano hacia el costado, donde la herida ya ha cicatrizado, dejando una larga cicatriz, y le revuelve el pelo. Bien, este es su mejor amigo después de todo. 

Presiona un botón y entra al ascensor del primer piso. Park espera hasta que las puertas se abran silenciosamente y luego lo ve y luce como un infierno. Enormes moretones debajo de los ojos, mejillas hundidas, mirada cansada y culpable, cabello mojado por la lluvia en la calle colgando a ambos lados de la cara. Se pone de pie, moviéndose torpemente de un pie a otro, con las manos en los bolsillos de su chaqueta ligera, y no se atreve a entrar. 

"Adelante", Jimin asiente hacia la sala de estar y va allí. Coge la botella y dos vasos y luego se sienta en el sofá. El amigo gira la cabeza y mira alrededor del apartamento. No había estado aquí hasta este momento; Park no permite que mucha gente entre a su fortaleza. 

"Es hermoso aquí", dice en voz baja. Jimin vierte alcohol en vasos y asiente. Sí, este apartamento es el único lugar donde se siente tranquilo y a gusto, por eso invirtió en él todas sus fuerzas y recursos para dejarlo ideal y a su gusto. 

- ¿Estás solo? - pregunta Yoongi levantando las cejas de forma inquisitiva. 

- ¿Por qué viniste? Pregunta Park, ignorando la pregunta y tomando un largo sorbo. Se sienta a su lado y también bebe, y guarda silencio unos segundos, como si ordenara sus pensamientos. 

"Perdóname", dice apenas audiblemente, bajando la cabeza con sentimiento de culpa. 

"No he estado enojado contigo en mucho tiempo". 

"Pero me estás evitando", dice el chico, pasándose la mano por la cara. 

- No. Últimamente he tenido muchos problemas. 

"Me enteré de la redada y de tu padre", dice Min, haciendo una mueca. 

"No diré que lo siento y toda esa tontería educada". Sé que no lo extrañas. Jimin asiente con la cabeza y bebe el resto de su vaso. Ahora hay mucha tensión e incomodidad entre ellos, como ocurre entre completos desconocidos. Duele darse cuenta de esto, porque alguna vez fueron mejores amigos. 

"Pensé mucho en lo que me dijiste entonces". Tienes razón, soy un inútil. 

"No dije que fueras un inútil, Min", dice Park, mirándolo. 

"Pero es así", sonríe amargamente el amigo.

"Tú siempre has sido el cerebro", agita la mano. 

"Me sentí muy inquietado cuando de repente me dejaste solo". Después de todo, te seguí todo el tiempo como un ciego, y cuando te fuiste, perdí el rumbo. Me he preguntado muchas veces ¿adónde debería ir sin ti? Y me di cuenta de que no lo sé. 

"No te dejé", dice Jimin en voz baja con dolor en su voz. 

"Simplemente actuaste como un niño caprichoso al que le quitaron su juguete favorito". Te dije que la venganza puede esperar, que hay que encontrar al verdadero culpable y que tengo problemas mayores que este. Pero simplemente estabas obsesionado con Jungkook y te estabas volviendo loco con el deseo de acabar con él.