Reflejo del Destino

~ Capitulo 10 ~

Ya era jueves en la tarde y regresaba de la escuela, estos días he tenido que lidiar con las malas caras y comentarios de mis compañeros y personas que ni conozco solo por ese estúpido Blog de la escuela, no han vuelto a escribir sobre mí pero Tamara jura vengarse por lo que me están haciendo, en fin el martes después del velorio nos quedamos en mi casa jugando Monopoly ya que no quería ver películas ni sobre pensar todo lo que ha está pasando.

No he vuelto a las clases de piano está semana y Sonia me ha insistido mandandome mensajes de apoyo y me excuso diciéndole que no estoy bien y que cuando me repusiera iría sin falta.

Estoy entrando a mi habitación y alisto las cosas que necesito para hacer la tarea de literatura que por cierto es para mañana y ni siquiera tengo la primera página.

Ayer por la tarde había aceptado el ofrecimiento de Leo en ir a la casa de él para hacer la dichosa investigación; no me mal entiendan me encanta leer y realizar los deberes pero no tengo cabeza para eso ahora, decidí aceptar  ya que la biblioteca más cercana que hay es en el centro de la ciudad y no quiero llegar tan tarde a casa.

Mi teléfono suena y es Tamara diciendo que ya está abajo esperándome.

Me pongo mi abrigo y mi gorrito gris para el frío y bajo las escaleras, antes de abrir la puerta me encuentro a mi gatito que está frotándose entre mis piernas, lo alzo y acarició un buen rato. Lo dejo en su hábitat y se desaparece de repente dejándome toda la ropa llena de pelos.

Al salir me encuentro con los guardaespaldas que vigilan toda la casa y les digo a los que están en la parte de la entrada principal que voy a ir con Tamara a hacer los deberes de la escuela. Ellos asienten sin decir palabra alguna lo cual me causa escalofríos es la espina dorsal ya que no me convencen mucho estos tipos que trabajan para mi padre.

- Si traes tu portátil? – le pregunto acomodándome en el asiento del copiloto.

- Claro, como ordenaste capitana- dice haciendo la pose con la en la frente mofándose de mí.

- ¿Ya pasaste las solicitudes para la Universidad? Porque estamos a tiempo para que podamos quedar juntas en la misma...- ella me interrumpe rodando los ojos.

- Elena relájate, ya pasé todas las solicitudes y de antemano gracias por ayudarme a realizar cada solicitud... No tendría tanto ingenio para escribir.

- Pero ahora debes hacerlo, no me vas a dejar sola haciendo la tarea - le advierto.

- Si, si como tú digas linda - comienza a tararear una canción que le encanta.

Cuando ya estamos a punto de llegar Tammy se empieza a acomodar el cabello y se coloca brillo labial viéndose por el retrovisor del auto haciendo poses y simulando dar besos.

- Qué haces? – la miro extraña soltando una risa.

- Pues tú que crees, me estoy arreglando – dice acomodándose el cabello de un lado.

- No vamos para ninguna fiesta, solo vamos hacer la tarea de Literatura – digo con las cejas levantadas.

- Tu sabes que no desaprovecho la oportunidad, además ese chico es muy guapo y me lo quiero ligar – dice sin censura lo cual no me sorprende, ella es así, siempre es abierta de lo que piensa y dice.

No digo nada más en el trayecto que nos queda. Nos bajamos del auto y sin más toco el timbre y me sigue sorprendiendo lo grande que es esta casa, es prácticamente una mansión.

Cuando se abre la puerta nos espera una grata sorpresa que no esperábamos encontrarnos.

- Que haces tú aquí – dice mi amiga paralizada.