cap. 63: Dentro de la tumba vacía

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-Luci… sabes que esto tarde o temprano pasaría – le dijo Naim bajo sus labios al sentir un pequeño temblor y el mismo sentir que un calor lo invadía, el fuego eterno – me salí sin permiso y mi castigo ha llegado

-¿Qué?

-Tengo que usarlo para abrir la primera puerta… el fuego que enviará de regreso a donde pertenezco

-¿Naim?

-Lo siento mucho, pero así tienen que ser las cosas… Ya supe lo que realmente sucedió entre las hadas y los vampiros y porque Katsumi lo atacó, pero no me toca, eso me lo dejo muy claro mi abuela, Tegan tendrá su oportunidad, es deber de él… yo salí por ti… porque en el fondo de mi ser, sabía que me necesitarías, que algo bueno teníamos que hacer

-Pero… que…

-Lo lamento mucho – suspiró dándole otro beso y luego…

Lucian abrió los ojos como platos cuando su mente se abrió por completo mostrando esa partecilla oculta que él mismo había bloqueado casi inconscientemente, pero no pudo hacer más cuando después de un “Te amo” el sintió como Naim le empujaba con fiereza y salía disparado por el cementerio hasta el otro lado

-¿Naim? – chilló Hermione al ver aquello y el vampiro saltó hacia la puerta del mausoleo

-¡Oh, no! – susurró Luna entendiendo todo

-¡Naim! – Gritó Lucían poniéndose en pie y yendo hacia el

-¡No dejen que se acerque! ¡Harry! – Gritó Naim - ¡Yo soy la primera llave, tienes que evitar que me toque!

La visión no fue la mejor, pues cuando Naim sujetó las puertas, de inmediato fue como si un ácido corrosivo se expandiera por sus manos y el vampiro solo apretó los dientes imprimiendo toda su fuerza y finalmente la puerta cedió y el dio un paso adelante sintiendo un dolor terrible en las manos, las cuales estaban negras

-Demonios – susurró Naim y de pronto la puerta que había roto se regeneró y con un fuerte golpe volvió a su sitio, dejándolo dentro

Por un momento no quiso volverse, sentía que algo había atrás de él, Naim sabía cuál era el castigo por desobedecer Saint City, ignoraba a donde iría, si la parte de conciencia que le quedaba se reuniría con su alma o no sería así, a lo mejor desaparecía para siempre y no le quedaba ni el consuelo del tormento del infierno

Una sombra oscura apareció entre las baldosas, el sintió un frío tremendo que le helaba su piel muerta, si fin había llegado, era lo que le quedaba por hacer, Lucían no era el indicado dado que sus días estaban contados, el castigo llegaría por él tarde o temprano, era mejor así, solo el fuego eterno del infierno podía abrir el paso a otro mundo, la llave era él, el fuego rompería el hechizo que protegía la tumba

“Naim”

Escuchó de pronto una vocecita y delante de él apareció Gail, afuera Harry, Hermione y Luna detenían a Lucían, quien estaba verdaderamente afectado, pero era inevitable, Naim había dicho que Lucían no podía acercarse más

-Ahora ya te recuerdo – susurró Naim

“Gracias por tu ayuda, no te preocupes, estaré contigo hasta el final de los días” – y el espectro de Gail puso sus manos encima de las de él, sintiendo una calidez infinita mientras el fuego comenzaba a disiparse dentro de aquel pequeño cubículo

Afuera, todos abrieron los ojos horrorizados al ver el fuego que se alzaba de súbito y que Naim parecía mantener fija su mirada como mirando algo, ellos no podían hacer nada más, solo mirar como aquel mausoleo se convertía en un pequeño infierno

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