GÓTICO... Seducción

Cap.59: Misterios

Hermione estaba esa mañana en la cocina cuando Naim entró y se acercó a ella sentándose en la mesa de la cocina, le miró fijamente y ella sorbió su café, solo esperaba a Luna para irse con ella al colegio

-¿Y Lucían?

-¡Buah! No aguanta nada… - sonrió – creo que no despertará en unas cuantas horas porque lo dejé agotado, será muy lobo feroz, pero a veces parece más un cachorrito, sobre todo cuando pone ojitos tiernos

-Pues… que envidia…

-Oye Granger, tengo una pregunta, anoche nos quedamos en ello

-¿Qué deseas saber?

-¿Sacaste el libro rojo de Saint city?

-¡Oh!

-Porque lo siento… esta en tu habitación, desea ser abierto y nos llama, pero me extraña que Lucían no te haya dicho nada aun sobre esta situación, a lo mejor sus percepciones están disminuidas

-Lucían… el me lo sugirió en uno de sus delirios, me imagino y yo… lo saqué

-El libro quiso ser tomado – susurró Naim – o de lo contrario por más sugerencias que Lucían te hubiese hecho, no lo hubieras podido tomar… ¿Sabías que con ese libro podrías entrar a Saint City de nuevo?

Hermione palideció…

-Claro, no significa que puedas encontrarlo tal y como lo dejaste, pero el libro tiene la clave para entrar de nuevo

-¿De verdad? – sus labios temblaron

-cuando se sabe usar, es como una guía hacia las puertas que deben abrirse para regresar a donde desean…

-¡Pero no lo he podido usar! Cuando lo abro comienza a brotar mucha sangre…

-Es porque solo dos cosas lo pueden abrir… un vampiro el primero, el segundo, el hechizo adecuado… es un libro que por lo común no nos dejan manejar, por eso también tiene un hechizo para que no lo podamos tocar, solo los humanos ¡Así que es todo un proceso!

-¿Y de verdad ese libro tiene la clave para entrar a esa academia?

-A la verdadera academia, Hermione…

Hermione sintió que su corazón se aceleraba ¿Y si con ayuda de Naim ella podía regresar a buscar a Draco? ¿Y si lo encontraba? A lo mejor él le daba el consuelo que necesitaba por la pérdida de sus bebitos y sin duda, se lo diría a Harry y Luna a la hora de la comida en el colegio

A sus primeras clases, sin querer buscó a los gemelos, estaban sentados al fondo, solitariamente, los deberes estaban sobre la mesa e instintivamente buscó el de ellos que aparecieron debajo de todos, los reviso ávidamente y vio que era un excelente trabajo, perfecto diría ella, miró de nuevo a los chicos, que parecían, tampoco quitarle la vista de encima

-Luken – le llamó cuando terminó la clase y el muchacho se acercó con su hermana a sus espaldas, parecía que no se separaban para nada

-Si profesora

-¿Puedes llevar los trabajos a mi despacho?

-En seguida – sonrió el muchacho mientras que ella simplemente se sentía tonta por mirarlos tanto ¡Pero es que parecían dos muñecos! Astra estaba con un peinado de lado y un hermoso broche, con el pelo larguísimo y lacio, tan linda y agraciada

-¿Y tú cómo te sientes hoy Astra?

-Mejor profesora, gracias por preguntar – susurró la chica y Luken la jaló mientras recogía todos los pergaminos y se la llevaba

En unos segundos estaban dentro del despacho de Hermione, como ella les había dado permiso, podían entrar sin problemas, Astra devoró todo lo que había ahí, las fotos que Hermione tenía, algunas con sus amigos, acarició algunos collares de perlas y de piedras que tenía sobre un joyero semiabierto, un abrigo que ella tenía sobre el respaldo de la silla, estaba maravillada