CAPITULO 33: "NO SIGAS SIENDO EGOÍSTA."

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—Thomas, ¿Qué pasa contigo? No entiendo quien eres..

La mujer de cabellos rubios se encontraba parada delante del ojiazul intentando obtener una respuesta, algo más allá que solo una mirada fría y sin ningún tipo de sentimiento. Pero, parecía algo imposible de conseguir, ya no sabía que más hacer.. Se estaba volviendo loca.

—Desde que ella se fue, dejaste de sonreír. Ya nada te importa lo suficiente..—Murmuro con los ojos cristalizados porque en ese momento entendió que se había casado con un hombre que no la amaba lo suficiente o no como ella pensaba.

—¿Qué quieres oir, Grace?—Pregunto cansado de escuchar sus preguntas para las que no tenía tiempo.—Me preguntas cosas que ya sabes, ¿O no? Ya sabes todas esas respuestas.

Ella asintió.

—Claro, ¿Como qué te casaste conmigo amándola a ella?—Murmuro con tristeza y la voz temblorosa.—Por supuesto que si.. La amas más que a ti mismo, por eso te sientes tan miserable en su ausencia.

—Grace, fuera.—Ordenó Polly ingresado a la oficina sin siquiera haber tocado la puerta.—Ahora.—Murmuro seriamente al ver que la rubia no se movia de su lugar.

La rubia le dedico una última mirada llena de enojo y tristeza antes de salir de la oficina, cerrando la puerta a sus espaldas de mala manera.

—¿Por qué tan apresurada?

Polly suspiro, sentándose.

—No vas a poder creerlo.—Murmuro con emoción. Thomas solo la miro en silencio esperando que siguiera hablando.—Iris llamó.—Contó y la expresión del ojiazul cambio por completo.

—¿Donde esta?—Pregunto eufórico. Listo para salir corriendo en busca de la castaña aunque se encontrara en la otra punta del mapa.

Negó suavemente.—Ella llamo a su familia. Esta bien, pero no dijo donde se encuentra.. Solo dijo que necesitaba unos días para ella sola y que volvería a llamar en un tiempo.

—¿Volvera?

—No lo se.. Pero lo importante es que sabemos que esta bien y que necesitaba algo de tiempo para ella.—Musito intentando tranquilizarlo.—Ella volverá.

—¿Cuanto tiempo necesita?—Pregunto sintiéndose frustrado. Necesitaba verla, abrazarla.—Esto me esta matando, Polly.. No tienes idea de lo difícil que esta siendo esto.

—Un corazón roto no se cura de una mañana a otra.—Contesto.—Dale tiempo para sanar su corazón.. Lo necesita más que nadie.

—Y yo la necesito a ella.

—Y ella te necesito a ti, ¿Estuviste?

—Polly..

—¿Estuviste?—Repitió.

Polly sabía perfectamente lo dañada que estaba Iris por culpa de su sobrino. Recordaba a la perfección cuantas noches la castaña se había dormido llorando o abrazada a ella. Siempre supo que este momento llegaría y la ponía feliz saber que Iris se estaba eligiendo por primera vez.

—No.

—Entonces dejala sanar.—Pidio en un tono suave.—No sigas siendo egoista con ella, no lo marece..

—Lo se.. Pero es tan difícil no tenerla conmigo—Suspiro—Es una tortura.. Necesito que vuelva.

Thomas, nunca se había sentido de esa manera a pesar de que no era la primera vez que Iris intentaba alejarse de él yéndose, pero esta vez algo se sentía distinto y eso era lo que más le asustaba.

—Lo hará, cariño. Ella volvera cuando sienta que es el momento correcto para hacerlo.

—Eso esperó..

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