Una historia más, un amor más, un final más... y yo sigo sin poder encontrar las palabras adecuadas para retribuirles todo el cariño, el apoyo y la vida que me dan en cada comentario.
Ustedes quizás no lo sepan, pero yo se los digo: no hay nada que disfrute más que leerles, contestarles, intercambiar teorías y filosofar sobre la vida, el amor, el sexo y nuestros traumas de la infancia.
Cada capítulo de esta historia se convirtió en una nueva oportunidad de convivencia con ustedes. De conocerles más, de que algunas personas me abrieran sus corazones respecto a los momentos (buenos, malos o confusos) que han estado viviendo; de que recordáramos juntxs a viejos amores, viejas amistades y viejas relaciones de distintas índoles. De que revistáramos a esas personas que nos marcaron y tocaron nuestras vidas en distintas formas, pero todas importantes en sus propios modos y en sus debidos tiempos.
A algunas personas tuve la fortuna de verlas enamorarse (y me deleité con las actualizaciones semanales de esa relación, guiño, guiño). Mientras que a otras las vi superar un amor que las marcó para siempre. Incluso hubo algunas personas a quienes las vi replantearse su presente y su futuro.
Con algunxs de ustedes, descubrí que compartimos el lado nerd hasta el tuétano y con otras más, compartí la mente más sucia que podemos tener. El denominador común entre todas las personas que me han acompañado en esta aventura, es el cariño enorme que les he tomado y que voy a extrañarles mucho entre esta y la siguiente aventura en la que nos embarquemos juntxs.
Lo que me han regalado aquí, simplemente no puede encapsularse en unas cuantas palabras. Pero sí les puedo decir que ahora están en mi corazón y que de ahí no hay escapatoria.
Me despido solo momentáneamente, porque en esta ocasión (y para beneplácito de mi querida sis separada al nacer: @MaGaChe01) amenazo con regresar con la historia de fantasía que llevo dos años prometiéndoles.
Eso sí, no puedo negarles que necesito algunas semanitas para poder avanzarla adecuadamente, pero de que llega, llega.
¿Qué dicen? ¿Que quieren algunos spoilers visuales? Ok, ok... aquí los tienen.
Mientras estamos en espera de esa historia, la cual todavía necesita bastante trabajo de mi parte, voy a comenzar a alimentar un apartado de escenas que no llegaron a las versiones finales de mis historias. A continuación, un poco de contexto:
Tengo muchas escenas (de todas mis historias publicadas) que fueron descartadas por diversas razones: ya sea que no ayudaban al avance de la historia, o que eran viajes de ego de la autora, pero que, quizás no aportaban gran cosa a la novela en sí misma.
A veces son background stories de personajes que no tienen gran relevancia (como en el caso de «Sólo a ella» en el que retiré una escena sobre toda la historia de la familia de Camilo, en la que se podían entender un poco más profundamente sus razones para querer continuar el legado de la galletera). Pero, seamos honestxs: a pocas personas les interesaban las razones de Camilo jajaja.
Algunos de mis autores favoritos, en especial Stephen King, incluyen escenas de esta índole a diestra y siniestra, llenando sus libros con escenas que fácilmente podrían quitarse y no afectarían al desarrollo de las historias. Y bueno, ellos pueden darse el lujo de hacerlo, y yo jamás voy a quejarme... pero no logro convencerme a mí misma de dejarlas en mis propias historias. Pero, después de algunas conversaciones en las que descubrí que siempre quieren un poquito más, decidí comenzar un libro que se va a llamar «Escenas descartadas», busquen esta portada en los siguientes días:
Ya me irán diciendo qué opinan de cada una de las escenas y si hice bien en quitarlas o si sí debieron llegar a los libros.
Antes de despedirme, les reitero, a quienes no hayan leído a mi hija Taylor o a Laury, que pasen por sus historias, que son bellísimas. Y si esta es la primera o segunda historia mía que leen, les invito a leer las otras que tengo, alguna podría gustarles.
Ahora sí, les regreso temporalmente sus jueves por la mañana. Nos leemos pronto. Mientras tanto, les dejo un abrazo del tamaño de Mercurio.
✦ GRACIAS INFINITAS ✦
ESTÁS LEYENDO
Los años son más cortos en Mercurio
Chick-Lit(LGBT+) La vida de Astrid está llena de contrastes: le encanta su trabajo, pero no soporta la idea de sentirse estancada como consecuencia de las trabas que su jefe le pone constantemente; tiene un grupo de amigos a los que considera su verdadera fa...