YOUTIFUL - Robby Keene.

excursión.

DRIZELLA estaba esperando a Johnny, con una bolsa llena de ropa.

Miguel se había ido a Mexico a buscar a su padre.

Le había dejado una carta.

Querida Drizella,
Sé que cuando me veas me matarás por haberme ido como si nada, perdón por abandonarte en el campeonato, sentía que ya no estaba luchando por mí. Al sensei le daba miedo saber de su pasado, pero yo necesito respuestas.
Has peleado genial, has jugado limpio, cosa que Cobra Kai no hizo.
Te quiere mucho, Miguel.

Escuchó unos toques en su puerta y tomó su mochila.

Abrió la puerta y se encontró con Johnny.

—Barker, ¿estás lista?—le preguntó Johnny y Drizella asintió.—Hay una norma. Uno, no puedes echarte atrás.

—Por Miguel iré a muerte.—dijo Drizella.

—Bien.—asintió Johnny y se dirigieron al coche.

Cuando Drizella abrió la parte de atrás vio a Robby sentado con el móvil.

—No.—negó Drizella y miró a Johnny.

—No puedes echarte atrás.—dijo Johnny.

Robby se bajó del coche y se puso junto a Drizella.

—Papá, ¿nos dejas un momento?—le preguntó Robby.

—Claro, claro.—dijo Johnny y entró en el coche.

—Al fin te veo la cara.—dijo Robby metiéndose las manos en los bolsillos del pantalón.

—Muy gracioso.—dijo Drizella sarcástica sin mirarlo a los ojos.

Robby la tomó del mentón y la obligó a mirarlo. Drizella sentía como el tacto de Robby quemaba en su piel.

—¿Qué ha pasado?—le preguntó Robby.

—No sé, dime tú. ¿Por qué motivo podría estar así?—le preguntó Drizella.

—No le des la vuelta a la pregunta.—sonrió Robby.

—Podrías preguntarle a Tory, ella lo sabe.—dijo Drizella y Robby dejó de tomarla del mentón.—No me gustaría ser el cuerno de alguien.—dijo Drizella y entró en el coche, de copiloto.

—No le digas a Robby cuál es nuestra intención del viaje. No lo sabe.—le murmuró Johnny a Drizella.—En marcha.—dijo Johnny una vez Robby subió al coche.