Drizella Barker es una chica que vive en Reseda, sus padres y sus hermanos se fueron a vivir a las colinas, ya que los padres han montado una buena empresa y ahora se les considera ricos, no quieren seguir en Reseda, por lo que le manda a su hija c...
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EL PRIMER COMBATE DE DRIZELLA, contra otra chica.
Daniel miraba atentamente a Barker, y eso Johnny lo notó y se acercó a la chica para darle indicaciones.
Drizella asintió todas sus indicaciones y se acercó al centro de la colchoneta.
—Preparados. Saludo.—anunció el referee y ambas chicas saludaron en su dirección.—De frente. Saludo.—dijo y amabas chicas saludaron entre sí.—¿Listas?
La chica del gi rojo se puso en guardia mientras que Drizella se puso en posición para hacer la patada de la grulla.
—¡Hajime!—anunció para que puedan empezar y Drizella hizo la patada de la grulla a la cara de la chica, dejándola en el suelo entre aplausos.—¡Yuko, Drizella!—anunció el árbitro.
—Se ha atrevido a copiarte la patada.—dijo Sam decepcionada a su padre.
El combate continuó y Drizella marcó punto con un barrido y un puñetazo en el estómago, y el tercer punto con una patada con giro al estómago que la dejó en el suelo.
—¡Ganadora, Drizella!—anunció el árbitro levantando el brazo de Drizella.
Robby hizo su combate y ganó a lo mejor de tres.
Drizella lo veía de reojo, no había hablado con él.
Katie contra un chico también ganó.
Ahora era la hora del Halcón, quien dio un puñetazo en la cara como último punto.
El árbitro levantó su brazo para anunciar su victoria y todos aplaudían mientras el gritaba.
Se quito la parte de arriba del Gi.
—Ay madre, qué sexy.—dijo Moon.
Halcón dio la espalda dejando ver su gran tatuaje en la espalda de un halcón con cresta azul y movió los hombros para que las alas del dibujo de movieran.
—Es increíble, pero funciona.—dijo Demetri.
Era la hora del pequeño rubio, Bert.
—¡Es injusto! ¡Le saca tres cabezas!—gritó Drizella.
Los del dojo lo animaban y Bert miró a su sensei, quien le alzó el puño para darle ánimos y Bert lo correspondió.
Como era de esperar, el pobre Bert acabó en el suelo.
—¡Vamos con los cuartos de final!—gritó el presentador.
Miguel ganó su combate, pata semifinal, miró a Sam y le apartó la mirada.
Drizella volvió a ganar su combate sin recibir ni un golpe y Halcón la abrazó por la cintura y la levantó del suelo.
Robby vió eso y no estaba contento, para el, Drizella no lo había visto un combate, pero no era así, se había visto todo su combate.
