El Rey Pálido de Hallownest se encontraba en su alcoba, observando los informes dispersos sobre su escritorio. Los peligros que acechaban en su reino comenzaban a pesar más de lo esperado. La infección, aunque sutil, ya había tocado a uno de sus habitantes, convirtiéndolo en una criatura agresiva y descontrolada. Lo habían mantenido encerrado en secreto, pero el Rey sabía que este era solo el inicio.
—pensando— Radiance... —murmuró para sí mismo, su voz apenas un susurro—. Su influencia está despertando de nuevo.
Sabía que la amenaza era inminente. Desde el principio, su plan había sido claro: las vasijas nacidas del abismo serían su arma para contener y derrotar a Radiance. Caelum, la Vasija Pura, era la clave. Él sería quien lucharía y destruiría a la amenaza, pero el Rey también había preparado otras vasijas como respaldo, en caso de que Caelum fallara. No podía permitirse ningún error.
Mientras el Rey contemplaba estos pensamientos, un sonido suave lo distrajo. Era una risa, una risa ligera que no había escuchado en mucho tiempo. Intrigado, se acercó al ventanal de su alcoba y miró hacia el jardín de la Reina. Allí, entre los arbustos y las flores, vio a Elyra y a Caelum.
La luminaria del alba reía mientras hablaba, su rostro iluminado por la luz suave del atardecer. Junto a ella, Caelum caminaba en silencio, pero su postura era diferente. A pesar de que su casco ocultaba cualquier expresión, el Rey notaba algo inusual en su comportamiento.
—pensando— ¿Qué está ocurriendo aquí? —se preguntó el Rey, observando con atención.
El Rey Pálido estudió a su hijo con detenimiento. Caelum, la Vasija Pura, había sido creado con un único propósito: ser la herramienta que destruiría a Radiance y protegería Hallownest. No debía tener emociones ni vínculos que lo desviaran de su deber. Sin embargo, allí estaba, mostrando una cercanía inusual con Elyra.
Elyra, la última de su linaje. La luminaria del alba, una figura que traía esperanza y prosperidad a Hallownest. Desde su llegada, el reino comenzaba a florecer nuevamente, y el Rey no podía ignorar el impacto positivo que tenía sobre el pueblo. Pero ver a su hijo, tan cercano a ella, encendió una chispa de preocupación en su mente.
—pensando— Caelum ha sido creado para un propósito mayor que esto... —pensó el Rey—. Pero... Elyra...
Su mirada se posó sobre Elyra, cuyo brillo natural contrastaba con la oscuridad que rodeaba a Caelum. Ella era pura, inocente y, lo más importante, la última de su linaje. No podía evitar pensar en las implicaciones de su extinción. La idea surgió, casi sin que él lo deseara.
—pensando— Si Elyra es la última de su linaje... —se dijo a sí mismo, sus pensamientos avanzando más rápido de lo que esperaba—. No estaría mal asegurar que no se extinguiera por completo. Un descendiente... —el Rey se detuvo, frunciendo el ceño—. Caelum podría... podría asegurar la continuidad del linaje de los luminarios.
Por un momento, la idea de que la Vasija Pura pudiera engendrar un heredero con Elyra se formó claramente en su mente. Un hijo nacido de la luz y la sombra, de dos linajes poderosos que podrían fortalecer aún más a Hallownest. Pero al instante, el Rey sacudió la cabeza.
—pensando— No... —se corrigió rápidamente—. No es el momento. Y no es su propósito.
Sabía que Caelum tenía un destino que cumplir, uno que no podía mezclarse con esos pensamientos de descendencia o vínculos emocionales. Aunque la idea lo había tentado por un instante, el Rey decidió descartarla... por ahora. Había demasiadas cosas en juego, y la amenaza de Radiance crecía cada día más. Cualquier distracción podría ser desastrosa.
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Hollow Knight - La Última Guardiana (Novela No Oficial)
FanfictionEste fanfic toma inspiración del universo de Hollow Knight, pero no sigue el lore oficial del juego. Aquí, la Vasija Pura será llamada Caelum, y Elyra será el nombre de la lectora. Los eventos y detalles de los personajes han sido reimaginados para...