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Me senté en la oficina del doctor Shepherd, ansiosa por continuar con las pruebas que habíamos comenzado hace unas semanas. El objetivo era desbloquear mis recuerdos asociados con el Ferrari que había visto en la calle.
El doctor Shepherd sonrió al verme.
- Estoy emocionado de ver cómo vas progresando - dijo. - Las pruebas han sido muy prometedoras hasta ahora.
Asentí, sintiendo una mezcla de emoción y nerviosismo.
- ¿Qué tenemos programado para hoy? - pregunté.
El doctor Shepherd se levantó y se dirigió a una mesa donde había varios objetos dispuestos.
- Hoy vamos a trabajar con objetos similares al Ferrari - explicó. - Un modelo a escala, una foto de un Ferrari en una pista de carreras, un casco de piloto...
Me acerqué a la mesa y miré los objetos con curiosidad.
- ¿Qué debo hacer? - pregunté.
El doctor Shepherd me indicó que tomara el modelo a escala del Ferrari y lo sostuviera en mis manos.
- Cierra los ojos y concéntrate en el objeto - dijo. - ¿Qué te viene a la mente?
Cerré los ojos y sentí el modelo en mis manos. De repente, una imagen fugaz apareció en mi mente. Un Ferrari azul oscuro, corriendo en una pista de carreras.
- ¡Doctor Shepherd! - exclamé, abriendo los ojos. - Vi algo.
El doctor Shepherd sonrió.
- ¿Qué viste? - preguntó.
- Un Ferrari azul oscuro, corriendo en una pista de carreras - dije.
El doctor Shepherd anotó algo en su libreta.
- Excelente - dijo. - Esto es un gran progreso.
Seguimos trabajando con los objetos, y con cada uno, más fragmentos de mis recuerdos comenzaron a emerger. Un recuerdo de una carrera en Mónaco, otro de una noche en un restaurante con una persona que me sonreía...
Mi corazón latía más rápido con cada recuerdo que recuperaba. Estaba cerca, muy cerca, de descubrir quién era y qué había pasado conmigo.
- Gracias, doctor Shepherd - dije, cuando terminamos la sesión. - Esto es increíble.
El doctor Shepherd sonrió.
- Tú eres la que está haciendo todo el trabajo - dijo. - Yo solo estoy aquí para guíarte.
Me sentí agradecida y emocionada por el progreso que había hecho. Estaba lista para seguir adelante y descubrir más sobre mi pasado.
Me senté en la oficina del doctor Shepherd, ansiosa por continuar con mi tratamiento. Habíamos hecho grandes progresos con las pruebas de objetos similares al Ferrari, y estaba emocionada de ver qué venía próximo.
