Mientras Franco seguía con sus flikitis preguntosos, Cris se acercó a Abril y le sonrió pícara.
— Hija, te busca tu Condorito.
Abril se sonrojó entendiendo que Cris hablaba de Marcos y se retiró al living.
Mientras ella se retiraba, Franco levantó una ceja.
— ¿Abu? ¡Pasa algo?
— Páseme el objeto que sacaste de la oreja de Abril. — Cris pidió con seriedad.
Franco abrió el bolsillo de su campera y le entregó el objeto.
— Tengo un camión de flikitis en la garganta, abu. — ese bajó la cabeza.
— ¿Y como te diste cuenta de eso? — Cris bajó la cabeza, un destello de culpa en su voz.
— Cuando estábamos hablando de su personalidad floricientosa, ella me contó de lo que hiciste con las fotos y videos y que eso despertó su personalidad ocurrente de cuando era niña y ella dijo algo de haber sido reseteada por el portal, ahí se me vino un flikiti y la teoría de que Abril pudiese tener un chip que la controlaba, empezamos un baile despelotado y yo vi que tenía eso en la oreja.
— ¿Y le dijiste algo a ella?
— No me pareció prudente, senti que no debía preocuparle y destruirla otra vez y menos con eso del cambio de línea temporal.
Cris asintió analizando el objeto. — Lo hiciste bien, eso le destruiría... Eso es algo que yo pensé que ya estaba enterrado pero ahora veo que no.
— ¿Ese chip tiene que ver con Jay y los reseteos?
Cris asintió angustiada.
— Así es... No sé cómo Abril recibió ese chip, pero eso es algo que Abril nunca podrá saber, ella no sabe que Jay existía y para ella su reseteo se debe al portal, es mejor que se siga así. Que Abril siga creyendo que su cambio de personalidad fue culpa del portal, no podemos destruirla con revelaciones innecesarias, prométeme que eso no saldrá de acá.
Franco miró a su abuela con seriedad. Aunque su curiosidad seguía latente, entendía la gravedad de la situación y lo mucho que Abril podría sufrir si se enteraba de la verdad.
— Te lo prometo, abu. No diré nada —respondió con un tono firme, aunque su mente seguía llena de preguntas sin respuesta.
Cris suspiró aliviada y se permitió un pequeño gesto de gratitud, colocando una mano sobre el hombro de su nieto.
— Gracias, Franco. Sé que no es fácil guardar algo así, pero es lo mejor para ella.
Franco asintió, pero no podía evitar sentir un peso en el pecho.
— ¿Y qué hacemos con esto? —preguntó, señalando el chip en las manos de Cris.
Ella lo examinó con una mezcla de precaución y tristeza.
— Lo destruiré. No podemos correr el riesgo de que alguien lo use contra Abril o que ella misma lo descubra. Pero primero, intentaré analizarlo para entender cómo llegó a ella.
Franco la observó con atención, notando el brillo de culpa en los ojos de su abuela.
— ¿Abu? ¿Por qué siento que hay más en todo esto?
Cris bajó la mirada, como si estuviera debatiéndose internamente. Finalmente, suspiró y decidió hablar, aunque con cautela.
— Franco, hay cosas sobre Jay y su conexión con nosotros que son demasiado complicadas para explicar ahora. Lo importante es que lo que hizo Jay pertenece al pasado, y hemos trabajado mucho para que Abril tenga la vida que merece.
