Atrévete a quererme

Capítulo 31

El sábado había llegado, Ger estaba muy nervioso vistiéndose para ir a la reunión familiar cuando escuchó entrar a alguien al cuarto.

-VERÓNICA: ¿dónde vas hermano?
-GER: voy a la casa de Silvia.
-VERÓNICA: Silvia, Silvia, siempre una Silvia, no entiendo lo que le ves a esa desconocida.
-GER: para tu información, no es ninguna desconocida, Silvia Navarro es mi novia.

Valentina que estaba pasando por el pasillo cerca de la puerta, escuchó a su tío y entro gritando

-VALEN: no puede ser, Silvia Navarro es mi mamá también.

Se le salió una carcajada a Ger, él la llevó en sus brazos y se sentó en la cama poniéndola en sus piernas, mientras que Verónica estaba parada muy molesta.

-VERÓNICA: ¿cuántas veces te han dicho que es de muy mala educación escuchar conversaciones de adultos?
-VALEN: pero...Si no fue mi culpa (Le contestó subiendo los  hombros)
-GER: princesa, Silvia es tu tía no tu mamá...
-VERÓNICA: ay, por favor, esa mujer nunca llegará a ser mi cuñada, de eso me encargaré yo.

Se salió del cuarto echa una furia y sacó su celular para llamar a alguien.

-Aló!
-VERÓNICA: Paola, te necesito, te espero en mi casa, anota la dirección.
-PAOLA: vale! Dámela, ahora mismo salgo para allá...

Gerardo de su parte seguía hablando con Valen intentando ignorar los últimos comentarios de Verónica.

-GER: princesa ¿quieres ir a la casa de tu tía Fernanda?
-VALEN: siiiiii pero ¿cuando me vas a llevar a conocer la casa de mi tía Silvia? (Preguntó con una mirada dulce)
-GER: no te precipites mi vida, por lo pronto, te vas a pasar el resto de la tarde en la casa de Fer, después te paso a recoger.
-VALEN: supeeeeer!

Efectivamente Ger la dejó en casa de su tía y fue rumbo a la casa de Silv. Al llegar estaba nervioso y a la vez ansioso por conocer al resto de la familia de su novia, mandó un mensaje a Silv avisándole que estaba en frente de su casa, ella lo fue a buscar, estaba hermosa, traía un vestido corto de color rojo sin mangas, con unos tacones negros medio altos. Mientras que Ger traía un traje negro con una corbata roja, una coincidencia que emocionó a los dos.

-SILV: no puedo creerlo, ¿es enserio?
-GER: Dios! Qué coincidencia (Se bajó del coche, cerró la puerta y le dio un tierno beso en sus labios)
-SILV: cosa que sucede cuando dos personas están enamoradas (correspondió a su beso)
-GER: es tan hermoso, te amo princesa.

Caminaron hacia la entrada, la primera persona que vio Ger fue un hombre no tan alto, pelo negro, estaba platicando con una mujer y al lado de ellos estaban 3 jóvenes, una mujer y dos hombres.

De inmediato lo identificó por su forma de hablar y su corazón se aceleraba al ver que el padre de Silvia giró su cabeza y empezaba a caminar hacia ellos.

Pero supo controlar los nervios, Silvia les presentó a su novio con una sonrisa que tenía las letras de Felicidad, todos estaban menos doña Silvia, bueno quizás es porque ella ya me conoce pensó Ger, poco a poco empezó a relajarse, con Silvia era imposible sentirse incómodo, lo abrazaba a cada rato, lo mimaba, no le importaba si había miles de gente ahí, lo besaba tiernamente cada vez que terminaba de presentarle a alguien.

Verónica de su parte ya estaba con Paola, le brindó un trago para que ella se sintiera más cómoda.

-PAOLA: ¿qué quieres Verónica? Yo tenía tantas cosas que hacer hoy...
-VERÓNICA: antes, respóndeme una pregunta.
-PAOLA: ¿cuál?
-VERÓNICA: ¿mi hermano te sigue gustando?
-PAOLA: es más guapo ahora que antes, tiene un buen trabajo ahora qué está viviendo en México así que sin duda sí y mucho. (Le contestó con una mirada perversa)